/ viernes 21 de junio de 2024

Los primeros seis de Sheinbaum y sus implicaciones para el Edomex

La presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo anunció este jueves a los primeros seis integrantes de su gabinete legal lo que podría marcar el inicio de una nueva etapa en la política mexicana; no solo se trata de los nombres, que por sí mismos son de llamar la atención, también se trata de las formas y el conjunto de significados implícitos que pueden tener en el ámbito de lo político.

Sobre los nombramientos: se trata de un conjunto experimentado de político académicos que ya han trabajado con la presidenta electa quien, al menos de inicio, parece estar apostando por un equipo que combina la lealtad política con pericia técnica, alejándose de aquella máxima que marcó el sexenio lopezobradorista de 90 por ciento lealtad 10 por ciento capacidad, lo que envía un claro mensaje de que la formas de actuar serán diferentes.

Empezando por la inclusión de Marcelo Ebrard para la Secretaría de Economía, no solo es un cumplimiento de compromisos sino que se trata de un movimiento estratégico que podría tener como objetivo secundario dar tranquilidad a la volatilidad de los mercados y empresas quienes se han mostrado muy nerviosos, sobre todo con los anuncios de las reformas constitucionales que amenazan con dinamitar la dinámica mercantil pero, principalmente, la dinámica de paridad y equilibrio entre los Tres Poderes de la nación.

Ebrard trae consigo una vasta experiencia en gestión pública y relaciones internacionales, habiendo sido una figura central durante el gobierno de López Obrador pero no como un incondicional abnegado sino como un colaborador de confianza con iniciativa y voluntad propias, lo que le costó, a la postre, el alejamiento del mandatario. Su nombramiento sugiere un enfoque pragmático hacia la economía con una búsqueda de políticas que apunten a la estabilidad y el crecimiento sostenido.Su experiencia en política exterior podría facilitar la atracción de inversión extranjera, un aspecto crucial para el desarrollo económico del país y muy abandonado en los últimos seis años.

La figura de Juan Ramón de la Fuente en la Secretaría de Relaciones Exteriores representa una visión más académica y prudente de la diplomacia nacional. De la Fuente, ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y coordinador de la transición entre el gobierno de AMLO y Sheinbaum, aporta un perfil técnico, sobrio y una sólida reputación en la comunidad internacional depositadas en un hombre de todas las confianzas para la presidenta electa.

Su nombramiento indica un posible cambio en la política exterior de México, con un énfasis en la negociación y una visión más global como herramientas de la diplomacia. De la Fuente ha sido un defensor de la cooperación internacional que podría traducirse en una política exterior más orientada a la colaboración y al fortalecimiento de lazos con organismos internacionales además de tener posiciones muy firmes respecto a los conflictos que se viven en el mundo actualmente.

Ernestina Godoy, exfiscal de la capital, será la consejera jurídica de la Presidencia; su nombramiento se debe a la relación construida con Sheinbaum durante su administración en la capital del país; en un perfil que ha demostrado conocimiento peor, sobre todo, lealtad y una extrema confidencialidad, como demostrado en el manejo de muchos temas en su paso por la FGJCDMX.

La experiencia de Godoy en la fiscalía sugiere un enfoque de la consejería jurídica que prevé acciones que requerirán mano dura en el sistema de justicia a nivel federal. Su trabajo previo ha demostrado poder enfrentar desafíos legales complejos, y su presencia en el gabinete podría significar una visión de lo que se espera sobre los cambios legales que se avecinan en el país.

Rosaura Ruiz es conocida por su trayectoria académica y su trabajo en la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de México, será la responsable del desarrollo científico que, por primera vez en la historia, será elevado al rango de Secretaría, lo que deberá ayudar en la toma de decisiones y, sobre todo, presupuesto para la investigación científica y la innovación tecnológica.

Su nombramiento podría significar un cambio importante en la visión de gobierno para la ciencia con la posibilidad de una visión más profunda que no solo se limite a la construcción de más universidades sino que vaya a fondo y brinde soluciones en temas sustanciales como el apoyo de becas para la investigación y la educación superior, dos puntos que han sido el talón de Aquiles del Conahcyt.

Julio Berdegué es un experto en temas agrícolas y desarrollo rural y en la Secretaría de Agricultura tendrá la nada menor responsabilidad de la actualmente inexistente sustentabilidad agrícola del país. Su perfil técnico y su experiencia en organismos internacionales como la FAO sugieren un enfoque basado en la tecnificación del sector agrícola.

El reto principal que enfrenta es darle la vuelta a la dependencia del exterior en granos básicos para el país como el maíz, el arroz y el frijol, que han vuelto a México vulnerable no solo a los cambios climáticos constantes sino también a las fluctuaciones del mercado que se han vuelto más volátiles por las guerras en zonas altamente productoras de granos, específicamente el caso ucraniano.

Para el Estado de México estos primeros seis puestos del gabinete podrían tener implicaciones significativas; ninguno de ellos está vinculado directamente con el grupo gobernante en la entidad, son figuras no desconocidas pero sí lejanas tanto a la gobernadora como a su gabinete; más aún, en el caso de Ebrard, su periodo como “corcholata” le permitió construir grupos que se verán fortalecidos por su presencia en el gabinete federal.

la actual administración tendrá seis meses para buscar no solo el acercamiento con las figuras que se han anunciado sino, también, deberán encontrar la manera de convencerlos de tal importancia que puede tener el Edoméx para sus objetivos nacionales más allá de las obviedades de la cercanía y la densidad poblacional que regularmente se esgrimen como argumentos de convencimiento en la pelea por el presupuesto de cada área con el resto de los estados.

Este gabinete no solo comienza a delinear la dirección del nuevo gobierno, sino que también envía un mensaje claro sobre las prioridades de Sheinbaum y su visión respecto a las lealtades de quienes la apoyaron y estuvieron con ella en el momento en el que fueron requeridos, incluso en el caso de Ebrard quien, a pesar de no vérsele muy activo en la campaña, fue más que suficiente el haber aceptado su derrota y reconocido el triunfo de Claudia para ser la candidata de Morena sin generar mayor problemática.

El gobierno estatal deberá echar mano de todas sus habilidades políticas para poder entablar relaciones con el nuevo gobierno federal ante un escenario en el que sean compañeros de bandera y colores pero no necesariamente partidarios de los mismos grupos ni de las mismas relaciones ni de las mismas amistades, algo muy importante cuando de negociar apoyos se trata.

La presidenta electa Claudia Sheinbaum Pardo anunció este jueves a los primeros seis integrantes de su gabinete legal lo que podría marcar el inicio de una nueva etapa en la política mexicana; no solo se trata de los nombres, que por sí mismos son de llamar la atención, también se trata de las formas y el conjunto de significados implícitos que pueden tener en el ámbito de lo político.

Sobre los nombramientos: se trata de un conjunto experimentado de político académicos que ya han trabajado con la presidenta electa quien, al menos de inicio, parece estar apostando por un equipo que combina la lealtad política con pericia técnica, alejándose de aquella máxima que marcó el sexenio lopezobradorista de 90 por ciento lealtad 10 por ciento capacidad, lo que envía un claro mensaje de que la formas de actuar serán diferentes.

Empezando por la inclusión de Marcelo Ebrard para la Secretaría de Economía, no solo es un cumplimiento de compromisos sino que se trata de un movimiento estratégico que podría tener como objetivo secundario dar tranquilidad a la volatilidad de los mercados y empresas quienes se han mostrado muy nerviosos, sobre todo con los anuncios de las reformas constitucionales que amenazan con dinamitar la dinámica mercantil pero, principalmente, la dinámica de paridad y equilibrio entre los Tres Poderes de la nación.

Ebrard trae consigo una vasta experiencia en gestión pública y relaciones internacionales, habiendo sido una figura central durante el gobierno de López Obrador pero no como un incondicional abnegado sino como un colaborador de confianza con iniciativa y voluntad propias, lo que le costó, a la postre, el alejamiento del mandatario. Su nombramiento sugiere un enfoque pragmático hacia la economía con una búsqueda de políticas que apunten a la estabilidad y el crecimiento sostenido.Su experiencia en política exterior podría facilitar la atracción de inversión extranjera, un aspecto crucial para el desarrollo económico del país y muy abandonado en los últimos seis años.

La figura de Juan Ramón de la Fuente en la Secretaría de Relaciones Exteriores representa una visión más académica y prudente de la diplomacia nacional. De la Fuente, ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y coordinador de la transición entre el gobierno de AMLO y Sheinbaum, aporta un perfil técnico, sobrio y una sólida reputación en la comunidad internacional depositadas en un hombre de todas las confianzas para la presidenta electa.

Su nombramiento indica un posible cambio en la política exterior de México, con un énfasis en la negociación y una visión más global como herramientas de la diplomacia. De la Fuente ha sido un defensor de la cooperación internacional que podría traducirse en una política exterior más orientada a la colaboración y al fortalecimiento de lazos con organismos internacionales además de tener posiciones muy firmes respecto a los conflictos que se viven en el mundo actualmente.

Ernestina Godoy, exfiscal de la capital, será la consejera jurídica de la Presidencia; su nombramiento se debe a la relación construida con Sheinbaum durante su administración en la capital del país; en un perfil que ha demostrado conocimiento peor, sobre todo, lealtad y una extrema confidencialidad, como demostrado en el manejo de muchos temas en su paso por la FGJCDMX.

La experiencia de Godoy en la fiscalía sugiere un enfoque de la consejería jurídica que prevé acciones que requerirán mano dura en el sistema de justicia a nivel federal. Su trabajo previo ha demostrado poder enfrentar desafíos legales complejos, y su presencia en el gabinete podría significar una visión de lo que se espera sobre los cambios legales que se avecinan en el país.

Rosaura Ruiz es conocida por su trayectoria académica y su trabajo en la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación de la Ciudad de México, será la responsable del desarrollo científico que, por primera vez en la historia, será elevado al rango de Secretaría, lo que deberá ayudar en la toma de decisiones y, sobre todo, presupuesto para la investigación científica y la innovación tecnológica.

Su nombramiento podría significar un cambio importante en la visión de gobierno para la ciencia con la posibilidad de una visión más profunda que no solo se limite a la construcción de más universidades sino que vaya a fondo y brinde soluciones en temas sustanciales como el apoyo de becas para la investigación y la educación superior, dos puntos que han sido el talón de Aquiles del Conahcyt.

Julio Berdegué es un experto en temas agrícolas y desarrollo rural y en la Secretaría de Agricultura tendrá la nada menor responsabilidad de la actualmente inexistente sustentabilidad agrícola del país. Su perfil técnico y su experiencia en organismos internacionales como la FAO sugieren un enfoque basado en la tecnificación del sector agrícola.

El reto principal que enfrenta es darle la vuelta a la dependencia del exterior en granos básicos para el país como el maíz, el arroz y el frijol, que han vuelto a México vulnerable no solo a los cambios climáticos constantes sino también a las fluctuaciones del mercado que se han vuelto más volátiles por las guerras en zonas altamente productoras de granos, específicamente el caso ucraniano.

Para el Estado de México estos primeros seis puestos del gabinete podrían tener implicaciones significativas; ninguno de ellos está vinculado directamente con el grupo gobernante en la entidad, son figuras no desconocidas pero sí lejanas tanto a la gobernadora como a su gabinete; más aún, en el caso de Ebrard, su periodo como “corcholata” le permitió construir grupos que se verán fortalecidos por su presencia en el gabinete federal.

la actual administración tendrá seis meses para buscar no solo el acercamiento con las figuras que se han anunciado sino, también, deberán encontrar la manera de convencerlos de tal importancia que puede tener el Edoméx para sus objetivos nacionales más allá de las obviedades de la cercanía y la densidad poblacional que regularmente se esgrimen como argumentos de convencimiento en la pelea por el presupuesto de cada área con el resto de los estados.

Este gabinete no solo comienza a delinear la dirección del nuevo gobierno, sino que también envía un mensaje claro sobre las prioridades de Sheinbaum y su visión respecto a las lealtades de quienes la apoyaron y estuvieron con ella en el momento en el que fueron requeridos, incluso en el caso de Ebrard quien, a pesar de no vérsele muy activo en la campaña, fue más que suficiente el haber aceptado su derrota y reconocido el triunfo de Claudia para ser la candidata de Morena sin generar mayor problemática.

El gobierno estatal deberá echar mano de todas sus habilidades políticas para poder entablar relaciones con el nuevo gobierno federal ante un escenario en el que sean compañeros de bandera y colores pero no necesariamente partidarios de los mismos grupos ni de las mismas relaciones ni de las mismas amistades, algo muy importante cuando de negociar apoyos se trata.