/ jueves 10 de octubre de 2024

Agenda IP | La discusión 'sacó chispas'

Empezó este miércoles (hasta el momento de concluir este escrito continuaba), la discusión en la Cámara de Diputados federal, de la iniciativa de reforma energética enviada por la presidenta Claudia Sheinbaum, a menos de diez días de iniciada su administración.

La reforma retoma la propuesta en el 2021 por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, la cual fue rechazada en su momento.

La iniciativa de la actual mandataria contempla modificar el artículo 25 de la Constitución, para que Petróleos Mexicanos (PEMEX) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) pasen de ser empresas productivas a ser empresas públicas; para priorizar las necesidades de los consumidores. En el 27se establece no otorgar concesiones para la explotación del litio.

Aunque sin ninguna posibilidad de que en esta ocasión se rechace nuevamente la propuesta presidencial, ante una mayoría arrolladora, la oposición planteó sus puntos de vista, dentro de los cuales quiero destacar la del diputado Gustavo de Hoyos Walter, la cual representa, de alguna manera, la opinión de la iniciativa privada del país, ya que el citado legislador fue presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX).

Gustavo de Hoyos planteó en su intervención en la tribuna, que el sector público no puede enfrentar solo el reto eléctrico de México, que incluye aprovechar el nearshoring y cumplir con el porcentaje de energías limpias que debe generar el país.

Consideró que, bajo el control centralizado de la CFE, se puede dar cabida a nuevos productores de energías renovables; sin embargo, enfatizó, los cambios que se proponen imposibilitarían la inversión privada, porque se impone el predominio de la empresa del Estado.

Además, advirtió que como está planteada, la reforma detonaría conflictos nacionales, pero también internacionales, pues afectaría lo establecido en el tratado comercial con Estados Unidos y Canadá en la materia.

El empresario sostuvo que la iniciativa presidencial es regresiva y los anteriores intentos por estatizar al sector energético no han dado buenos resultados para el país.

En 2021, con motivo de la propuesta por el entonces mandatario López Obrador, el actual presidente de COPARMEX, José Medina Mora, publicó un artículo en “El Sol de México”, en el cual señalaba que, si bien, la ley vigente “presenta algunas fallas que deben atenderse y esta es la oportunidad de revisar”, fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad “no se logrará otorgándole el control del sector”.

Por un lado, decía “preocupan la monopolización de toda la cadena de valor y la desaparición de órganos reguladores y, por otro lado, se requiere una reestructura financiera para mejorar su productividad y eficiencia”.

Antes de que iniciara este miércoles la discusión en el pleno de la Cámara de Diputados, la presidenta Sheinbaum Pardo aseguró en la conferencia mañanera, que se busca que PEMEX y la CFE sigan siendo empresas productivas, pero ahora lo harán en diferentes condiciones, pues anteriormente “al ser regidas por leyes mercantiles y no públicas quedaron rezagadas”.

En la misma conferencia, la secretaria de Energía del gobierno federal, Luz Elena González, indicó que al convertir a estas dos empresas en productivas, se dejó de lado la seguridad energética del país.

Llama la atención que en la víspera de esta discusión, Sheinbaum Pardo se reunió con el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CEE), Francisco Cervantes Díaz, en la cual, de acuerdo con la presidenta se trataron varios temas “para iniciar agenda” con el sector privado, aunque entre esos asuntos no se mencionó la reforma energética.

Facebook: María Cristina Valenzuela Cosío

Correo electrónico: cristina9valenzuela@gmail.com

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