/ lunes 20 de mayo de 2024

Contexto | ¿Mexicanos vs mexicanos?

El presidente divide a los mexicanos.

Eso parece causarle placer.

Se crea al enemigo (llamándolo fifi o conservador) para justificar un discurso político porque el discurso es débil y requiere de un contrario imaginario.

Lo ocurrido, previo a la marcha de la marea rosa, retrata al régimen por completo. Lo desnuda.

El presidente y el régimen que representa no son demócratas.

Su intromisión en el proceso electoral esta más cerca de los viejos regímenes autoritarios que de una democracia moderna.

Le molesta que el zócalo de la ciudad de México lo llenen quienes no piensan como ellos.

Una vez más la bandera estuvo en el centro del debate como si esta fuera propiedad de los gobernantes. Y en ese sentido es muy ingenuo pensar que los de la CNTE, afín al régimen, haya bloqueado por su propio interés la colocación de la bandera y decidido permanecer en la plancha del zócalo.

Igual de ingenuo es creer que el doble hoy no circula haya sido producto del azar. Se veía venir desde hace semanas.

Todo para impedir la manifestación libre de las ideas. Pero la presión de la movilización de la gente ha hecho posible ganar las calles.

Tal parece molestar que una mujer de origen indígena, como Benito Juárez, pueda llegar a la presidencia y robar el protagonismo en la historia.

Es parte del complejo criollo de la clase gobernante que ve solo en los indígenas, en los pobres, una herramienta de acceso al poder, un elemento de discurso.

Los hechos están demostrando lo que la candidata oficial tuvo que reconocer: que al presidente lo animó la ambición personal para llegar al poder…no fue ni el interés por los pobres ni mejorar las condiciones de los mexicanos sino tal vez, y como todos, el disfrute de los privilegios del poder y su imaginación de pasar a la historia…ya en la histeria. Y la evidencia: a los pobres no los sientan a la mesa de palacio nacional como lo si lo hace con los grandes empresarios mexicanos y extranjeros….los pobres son útiles para los mítines no para sentarlos a la mesa de palacio…son usados en el discurso en un discurso hipócrita de amor a México.

Y ya se sabe que las cifras oficiales dirán que fueron 90 mil porque el presidente había prometido que si algún día se concentraban cien mil personas en el zócalo el presidente renunciaría.

Pero la democracia se arrebata siempre a los gobernantes…por eso siempre hay que tomar las calles y ganar la palabra. Solo así se hace democracia.

…y los mexicanos se enfrentan en las calles por haber sido tolerantes con el crimen en donde ya han muerto cerca de doscientos mil mexicanos producto de enfrentamientos entre mexicanos contra mexicanos…, en sus hogares, entre amigos unos mexicanos también se enfrentan más que por emoción que por la razón.

No es bueno para México el que los mexicanos se enfrenten.

Con ello todos perdemos.

Es tiempo de reflexionar sobre la actitud del régimen actual.

La herencia que se está dejando no es buena ni para la democracia ni para México.

Hoy hay más mexicanos en pobreza extrema que antes….mientras los políticos están contentos.

Mientras siguen matando candidatos, aun estando el presidente en Chiapas: más mexicanos contra mexicanos.

Nunca ha sido bueno para México dar todo el poder ni todos los votos a un solo hombre o a un solo partido….la naciente democracia en México es la que está en juego y con ello nuestras posibilidades de libertad.

Correo: contextotoluca@gmail.com

El presidente divide a los mexicanos.

Eso parece causarle placer.

Se crea al enemigo (llamándolo fifi o conservador) para justificar un discurso político porque el discurso es débil y requiere de un contrario imaginario.

Lo ocurrido, previo a la marcha de la marea rosa, retrata al régimen por completo. Lo desnuda.

El presidente y el régimen que representa no son demócratas.

Su intromisión en el proceso electoral esta más cerca de los viejos regímenes autoritarios que de una democracia moderna.

Le molesta que el zócalo de la ciudad de México lo llenen quienes no piensan como ellos.

Una vez más la bandera estuvo en el centro del debate como si esta fuera propiedad de los gobernantes. Y en ese sentido es muy ingenuo pensar que los de la CNTE, afín al régimen, haya bloqueado por su propio interés la colocación de la bandera y decidido permanecer en la plancha del zócalo.

Igual de ingenuo es creer que el doble hoy no circula haya sido producto del azar. Se veía venir desde hace semanas.

Todo para impedir la manifestación libre de las ideas. Pero la presión de la movilización de la gente ha hecho posible ganar las calles.

Tal parece molestar que una mujer de origen indígena, como Benito Juárez, pueda llegar a la presidencia y robar el protagonismo en la historia.

Es parte del complejo criollo de la clase gobernante que ve solo en los indígenas, en los pobres, una herramienta de acceso al poder, un elemento de discurso.

Los hechos están demostrando lo que la candidata oficial tuvo que reconocer: que al presidente lo animó la ambición personal para llegar al poder…no fue ni el interés por los pobres ni mejorar las condiciones de los mexicanos sino tal vez, y como todos, el disfrute de los privilegios del poder y su imaginación de pasar a la historia…ya en la histeria. Y la evidencia: a los pobres no los sientan a la mesa de palacio nacional como lo si lo hace con los grandes empresarios mexicanos y extranjeros….los pobres son útiles para los mítines no para sentarlos a la mesa de palacio…son usados en el discurso en un discurso hipócrita de amor a México.

Y ya se sabe que las cifras oficiales dirán que fueron 90 mil porque el presidente había prometido que si algún día se concentraban cien mil personas en el zócalo el presidente renunciaría.

Pero la democracia se arrebata siempre a los gobernantes…por eso siempre hay que tomar las calles y ganar la palabra. Solo así se hace democracia.

…y los mexicanos se enfrentan en las calles por haber sido tolerantes con el crimen en donde ya han muerto cerca de doscientos mil mexicanos producto de enfrentamientos entre mexicanos contra mexicanos…, en sus hogares, entre amigos unos mexicanos también se enfrentan más que por emoción que por la razón.

No es bueno para México el que los mexicanos se enfrenten.

Con ello todos perdemos.

Es tiempo de reflexionar sobre la actitud del régimen actual.

La herencia que se está dejando no es buena ni para la democracia ni para México.

Hoy hay más mexicanos en pobreza extrema que antes….mientras los políticos están contentos.

Mientras siguen matando candidatos, aun estando el presidente en Chiapas: más mexicanos contra mexicanos.

Nunca ha sido bueno para México dar todo el poder ni todos los votos a un solo hombre o a un solo partido….la naciente democracia en México es la que está en juego y con ello nuestras posibilidades de libertad.

Correo: contextotoluca@gmail.com