Uno de los retos que toda nación enfrenta es brindar a cada uno de sus ciudadanos la oportunidad de tener movilidad social para poder enfrentar la menor cantidad de carencias y limitantes en su vida diaria; y México no es ajeno a esta realidad.
En nuestro país el referente más empleado al hablar de carencias es la llamada pobreza multidimensional que se calcula a partir de la información que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), recaba cada dos años a través de la ENIGH (Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares); bajo este esquema, podemos señalar que una persona se encuentra en pobreza multidimensional cuando tiene al menos una carencia social y sus ingresos son insuficientes para adquirir los bienes y servicios que requiere para satisfacer sus necesidades.
Las carencias sociales hacen referencia a la falta de acceso a la salud, a la seguridad social, a la educación, a una vivienda, a servicios básicos en la vivienda y a la alimentación. Y de acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la pobreza tiene múltiples dimensiones, siendo sus principales causas el desempleo, la exclusión social y la alta vulnerabilidad de ciertas poblaciones ante desastres, enfermedades y otros fenómenos que les impiden ser productivas.
En la actualidad, existen alicientes para mantener un trabajo hacia la erradicación de la pobreza en nuestro país, la pobreza ha mantenido una tendencia a la baja, ya que la población en México que vive en situación de pobreza disminuyó en 5.1 millones de personas, en el periodo de 2018 a 2022, de acuerdo a información del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL).
Pese a estas buenas cifras, uno de los retos más importantes de nuestro país es el número creciente de mexicanos que enfrentan la falta de acceso a los servicios de salud, ya que se presentó un aumentó en más de 30 millones de personas en un periodo de 4 años (2018-2022), al pasar de 20.1 a 50.4 millones de personas.
Como podemos observar, la pobreza es un reto global que involucra a personas y a sus familias, por lo que México debe hacerle frente con acciones concretas. Sin embargo, esta no es una tarea exclusiva de las autoridades, por lo que resulta fundamental que cada uno de los sectores aporte su granito de arena con oportunidades que brinden oportunidades para aquellos que históricamente no las han conseguido.
Es conocido que la pobreza es resultado de múltiples factores, por lo que resulta imprescindible generar un frente común entre autoridades y sociedad para concretar proyectos y oportunidades para entregar buenos resultados a las próximas generaciones de mexicanos.
De acuerdo a especialistas del Banco Mundial, para erradicar la pobreza es necesario abordar sus múltiples dimensiones; los países no pueden enfrentar adecuadamente este problema sin mejorar también el bienestar de las personas de manera integral, lo que incluye un acceso más equitativo a la salud, la educación, y la infraestructura y los servicios básicos, entre ellos los servicios digitales.
Lic. Gilberto Javier Sauza Martínez / Vicepresidente de CONCAEM
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