A quienes tuvimos el privilegio de ser mexiquenses por nacimiento o adopción, se nos ha inculcado el cariño por esta tierra que históricamente ha sido testigo de innumerables acontecimientos que han impactado de manera positiva en la construcción de la nación y de la propia entidad. Incluso, hay quienes han mencionado que los mexiquenses somos doblemente mexicanos porque el nombre de la entidad incluye el nombre de nuestro país.
Como ciudadanas y ciudadanos mexiquenses, hemos tenido la oportunidad de vivir en una entidad que es un enorme mosaico cultural, religioso, político, histórico y geográfico, sin dejar de ser un espacio en el que se respetan y conviven todas las ideas.
Anuncios de inversión generan oportunidades de crecimiento y en el Estado de México se han realizado esfuerzos loables para mantener el dinamismo y la actividad económica pese a los efectos negativos de la pandemia de Covid-19; durante los últimos cuatro años y medio, la entidad mexiquense ha captado más de 10 mil 300 millones de dólares de inversión extranjera directa, ubicándose como la segunda entidad con mayor captación, de acuerdo al mensaje del Gobernador del Estado, Alfredo Del Mazo.
Anuncios y esfuerzos como estos, son parte de los proyectos que definen la política económica del estado, en el que el impulso al sector logístico es un pilar para el Estado de México; donde la posición estratégica y privilegiada que implica ubicarse dentro del mercado de consumo más grande del país con más de 22 millones de consumidores es aprovechada al máximo.
De igual forma, el trabajo en infraestructura de comunicación permite aprovechar al máximo la red férrea y de autopistas para conectar a la entidad mexiquense con el norte y con el sur del continente, hacia el Golfo de México y hacia el Océano Pacífico. Somos un punto estratégico de conexión con el resto del mundo.
Y finalmente, contar con colaboradores altamente capacitados y calificados permite que empresas e industrias fijen su atención en las acciones económicas que se llevan a cabo en unas de las economías más importantes del país.
Debemos mantener y sumar esfuerzos hacia la construcción de políticas públicas que promuevan la generación de industrias, que lleven la regulación hacia un tema de confianza hacia el empresario con inspecciones posteriores y aleatorias, en el que la confianza hacia el empresario sea una constante.
Donde se construya un nuevo esquema educativo y plan curricular apegados a la nueva realidad económica y a las nuevas áreas de inversión y crecimiento.
Todo esto debe tener el objetivo de generar bienestar social, empleabilidad y movilidad social; con estos elementos tendremos un EDOMEX con ciudadanos más plenos y con mayores oportunidades de desarrollo.
Lic. Gilberto Javier Sauza Martínez / Consejero Presidente de CONCAEM
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