Con el cierre del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, vino la publicación el 30 de septiembre de dos decretos en el Diario Oficial de Federación. El primero la reforma a la Guardia Nacional, que hoy queda adscrita formalmente a la secretaria de la Defensa Nacional y la otra, en materia indígena a la cual nos vamos a referir a continuación.
La reforma al artículo 2 de la Constitución fue aprobada en septiembre por el Congreso de la Unión, y les reconoce a los pueblos y comunidades indígenas como sujetos de derecho público con personalidad jurídica y patrimonio propio.
"La nación tiene una composición pluricultural y multiétnica sustentada originalmente en sus pueblos indígenas, que son aquellas colectividades con una continuidad histórica de las sociedades precoloniales establecidas en el territorio nacional; y que conservan, desarrollan y transmiten sus instituciones sociales, normativas, económicas, culturales y políticas, o parte de ellas".
Además, especifica los derechos culturales, lingüísticos, de defensa legal, de organización económica y social y de participación en consultas.
La modificación aborda las obligaciones de las autoridades para impulsar el desarrollo comunitario y regional, determinar las asignaciones presupuestales, afianzar la protección del patrimonio cultural, fortalecer la educación indígena, intercultural y plurilingüe, dar perspectiva intercultural al acceso a la salud y garantizar el derecho a la alimentación.
De la misma forma, esta reforma busca asegurar la participación efectiva de las mujeres indígenas, en condiciones de igualdad, en los procesos de desarrollo integral de los pueblos y comunidades indígenas, su acceso a la educación, así como a la propiedad y posesión de la tierra.
Pero hay que recordar que estas modificaciones tienen un origen en el movimiento armado en Chiapas en 1994, cuando el Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en voz de Rafael Guillen, alias “el subcomandante Marcos” le declararon la Guerra al Gobierno mexicano, entonces encabezado por el presidente Carlos Salinas, y demandado el reconocimiento y respeto a los derechos de los pueblos originarios en todo México.
Como recordamos se abrió un cese al fuego entre las partes y se llegaron a los “Acuerdos de paz de San Andrés Larrainzar”. Pero el movimiento armado tomo un segundo impulso con la llegada del presidente panista Vicente Fox en el año 2000 a la Presidencia de la República, ya que el EZLN inicio una caravana por la defensa de los pueblos indígenas a principios del 2001 que concluyó con la recepción de la comisión de representantes el movimiento armado en la Cámara de Diputados y dio pie a la primera gran modificación constitucional, en materia de pueblos originarios, que se publicó el día 14 de agosto del 2001.
Ahora se agrega en justicia social a los afromexicanos, que al igual que los pueblos indígenas, tienen su historia, usos y costumbre y derechos.
En hora buena por el Congreso de la Unión, que reconoce la “pluriculturalidad” de nuestro país y con ello nos da pisos parejos para todos.
NOTA. - El mejor de los éxitos a la Mtra. María de la Luz Quiroz Carbajal por su nombramiento como Coordinador Gral. de Litigación de la fiscalía general de Justicia del Edomex.
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