/ martes 24 de enero de 2023

Rescate Tierra | La Tierra contra el hombre... Transición energética


Durante la crisis ambiental en Londres en 1952, llamada “The Great Smog”cuando la visibilidad se redujo por la contaminación y varias personas murieron al no poder respirar, mientras las autoridades se negaban a implementar medidas de control, por la pérdida económica, ya que muchas empresas y negocios tendrían que parar al no consumir carbón y reducir las emisiones, provocando que en las casas, el frio crecería.

México padeció a finales del siglo pasado, en la década de los 80 un fenómeno similar al de Inglaterra, los pájaros caían muertos en el suelo de la ciudad y la visibilidad era complicada, comenzando a aplicarse en 1989 el hoy no circula, para controlarlo.

Entonces, habían transcurrido más de 15 años desde que se prendiera la alerta mundial por 3 temas fundamentales. La capa de ozono de la atmósfera, que nos protege de los rayos solares dañinos para el ser humano, tenía un orificio que crecía y amenazaba con dejar de protegernos, el hombre era responsable de su daño por el uso de gases refrigerantes, aerosoles y substancias industriales. Aunado a ello, la temperatura del planeta se había incrementado desde la segunda guerra mundial, acelerando su ascenso conforme la industria crecía y la forma natural de dispersión del calor era alterada por el comportamiento humano, “causas antropogénicas le llaman”. El esmog generado, formó una capa que impidió que el calor ascendiera modificando la temperatura del espacio donde habitamos los seres vivos del planeta, la biósfera, derritiendo los polos y los glaciares continentales impulsando el tercer tema, el cambio climático. Un fenómeno intensificado de manera no natural, al modificar sistemas de equilibrio naturales por la intervención del hombre.

Me explico, las corrientes transoceánicas que circulan el planeta y servían como regulador de la temperatura, corriendo frias desde el norte y combinándose con las más cálidas del ecuador fueron más, conforme los polos se derretían, rompiendo el equilibrio, generando modificaciones meteorológicas, huracanes de gran intensidad, lluvias torrenciales en temporada no esperada, fríos intensos y mortales, además de días calurosos en exceso.

Es como si la Tierra, nuestra casa, se defendiera de su peor enemigo, el hombre, reabasteciéndose de ozono con tormentas eléctricas, recargando mantos freáticos con inundaciones y lluvías, modificando microclimas y generando catástrofes, para reducir el número de seres vivos del planeta a niveles de sustentabilidad natural. No hablo de las prácticas que hoy intentamos implementar en todas las actividades humanas para que el uso de los recursos en la economía y la producción no destruyan la sustentabilidad y acaben con las posibilidades de superviviencia humana. Hablo de un mecanismo de control natural de la naturaleza, para protegerse del hombre.

El planeta hace, lo que la humanidad no quiere hacer. Reducir las emisiones de bióxido de carbono a la atmósfera, por el uso de combustibles contaminantes, gas, petróleo y carbón, utilizando en su lugar, energía solar, eólica, magnética, hidraúlica. Bajando el precio de automóviles eléctricos e híbridos. Recargando los depósitos naturales de agua por inundaciones que forzan la absorción hídrica, ante la pérdida de maza forestal en zonas de recarga. Nuestro hábitat ve cambiar la temperatura ambiental generándose condiciones que parecen acercarnos a una posible era de hielo, que proteja las zonas destruidas por el abuso de la humanidad.

Parece que, la Tierra se defiende de nosotros.

Licenciado en Comunicación por la UAEM

Maestrando en Periodismo Político por la Carlos Septién

Pedro_gomez77@hotmail.com