Ayer fue 11 de noviembre en Azerbayjan, y comenzó la COP29 en un escenario económico mundial, no prometedor, con conflictos latentes entre Israelies y Yijadistas islámicos, con una contaminación por carbono que no baja, con una transición a energías limpias, que va lenta, mientras el cambio climático muestra su acelerada transición y la mitigación del daño no es visible y poco vista es la financiación para naciones afectadas por fenómenos meteorológicos consecuencia del calentamiento global, porque quienes deberían distribuir los recursos, lo han dejado en el sector privado y público de los países.
Hoy es 11 de noviembre en México y los comunicados de las primeras reuniones de la COP29 comienzan a llegar:
El mensaje del Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, debería sacudir la conciencia de los líderes de las naciones participantes, “tuvimos el año mas caliente, el mes mas caluroso, el día con la mayor temperatura”, parafraseándolo, mencionó al G20 como el grupo de naciones que más contribuyen al calentamiento global, no mecionó a sus integrantes solo el grupo que esta conformado por Alemania, Arabia Saudita, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica, Turquía y la Unión Europea” de entre ellos 6 son los que mas contribuyen con emisiones de bioxido de carbono a la atmósfera: Estados Unidos, China, Rusia, Unión Europea, Japón e India.
“Estamos dando una clase magistral sobre destrucción climática: Familias que corren para salvar sus vidas antes de que llegue el próximo huracán; Biodiversidad destruida en mares sofocantes; Trabajadores y peregrinos desplomados bajo un calor insoportable; Inundaciones que arrasan comunidades y derriban infraestructuras; Los niños se van a la cama con hambre mientras las sequías arrasan los cultivos. Todos estos desastres, y más, están siendo potenciados por el cambio climático provocado por el hombre.
Y ningún país se salva”
“We dont have time” deja ver un documental de la devastación del Estado Nigeriano Delta, una estado con alta producción de petróleo crudo y gas, cuya agua no se recomienda para consumo y con alto índice de pobreza a pesar de su riqueza y que ha sido golpeado por el cambio climático afectando a los mas pobres de la Nación, quizá esto pudiera compararse a lo ocurrido en Acapulco en dos ocasiones durante este año, aunque por otro fenómeno.
Los 6 países más contaminadores contribuyen con poco más del 50 por ciento. Los otros 15 con un 20 a 30 por ciento y los restantes de 196 participantes en la COP29 con el otro 20 por ciento.
“En nuestra economía global, continuó el Secretario de la ONU Antonio Guterres, los shocks en la cadena de suministro aumentan los costos, en todas partes. Las cosechas diezmadas hacen subir los precios de los alimentos en todas partes. Las casas destruidas aumentan las primas de seguro, en todas partes. Esta es una historia de injusticia evitable. Los ricos causan el problema, los pobres pagan el precio más alto.
Oxfam descubre que los multimillonarios más ricos emiten más carbono en una hora y media que la persona promedio en toda su vida. A menos que las emisiones caigan en picado y la adaptación se dispare, todas las economías enfrentarán una furia mucho mayor.
Pero hay muchos motivos para tener esperanza”.
“Todos los países deben hacer su parte. Pero el G20 debe liderar. Son los mayores emisores, con mayores capacidades y responsabilidades. Deben aunar sus conocimientos tecnológicos, con los países desarrollados apoyando a las economías emergentes. Cada nación debe tener las herramientas y recursos para la acción climática. Y las Naciones Unidas apoyarán ese esfuerzo en cada paso del camino: Estamos apoyando a los países en desarrollo con nuevas NDC a través de la iniciativa Promesa Climática; Y luchar por la justicia en la revolución de las energías renovables a través de nuestro Panel sobre Minerales Críticos para la Transición Energética. Pero, en última instancia, sólo ustedes pueden cumplir con la ambición y la acción nacionales. Sólo tú puedes ganarle al reloj 1,5 grados centígrados. Las inversiones en adaptación pueden transformar las economías, impulsando el progreso en todos los objetivos de desarrollo sostenible. Necesitamos que los nuevos planes de acción climática de los países establezcan las necesidades de financiación de la adaptación”.
Partes del discurso de Antonio Guterres Secretario General de la ONU al inicio de la COP29 y de la organización We dont have time.