Un logro muy importante para las mujeres ha sido el reconocimiento de que la violencia cometida en su contra, constituye un asunto de interés público y es una violación de derechos humanos de manera sistemática; aunque actualmente las legislaciones nacionales e internacionales, establecen la obligación de los estados de prevenir, atender coma investigar, reparar y sancionar la violencia digital, falta mucho por hacer.
Es por ello que en México, las Legislaturas Locales optaron por reformas legislativas importantes criminalizando la distribución no consentida de imágenes y videos íntimos y acuñando conceptos de violencia digital; en 2020 bajo un esquema de coordinación y colaboración con las instancias del Sistema Nacional de Transparencia, Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales, se aprobó un pronunciamiento que propuse hacia las autoridades y ciudadanía para prevenir la violencia digital y el mal uso de datos personales en plataformas digitales, poniendo cimientos importantes para la visibilización de una problemática que ya se veía venir como una de las principales en la era digital.
Así, en 2021 se aprobaron reformas al Código Penal Federal y a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una vida libre de violencia, reconociendo este concepto y tipificando el delito de violación a la intimidad sexual a través de la distribución no consensuada, la llamada "Ley Olimpia".
En ese mismo año, la Red Iberoamericana de Protección de Datos Personales emitió una declaración contra la violencia digital en mujeres y niñas, a través de la cual uno de los llamados más contundentes era hacia las campañas de concienciación y sensibilización sobre esta problemática, derivado de ello, conscientes de que el Estado de México, era un foco importante y concentración en esta problemática por sus niveles de conectividad, se implementó el micrositio de violencia digital para prevenir el mal uso de datos personales y con ello evitar conductas como las relacionadas con violencia digital, así como el esfuerzo de acercamiento a las adolescencias y juventudes mediante Cines Conversatorios, para debatir y dialogar sobres este fenómeno creciente, cómo evitarlo y ayudar a las víctimas.
A cuatro años de haber propuesto aquel pronunciamiento en el seno del Consejo del Sistema Nacional, frente a una constante amenaza a los organismos garantes que tutelan la protección de datos personales, el mes pasado en la Red Iberoamericana de Protección de Datos Personales propuse nuevamente una declaratoria para prevenir la violencia digital, sin embargo en esta declaratoria, se hace un especial énfasis en las prácticas llevadas a cabo en México España, Portugal y Panamá y en la identificación de las problemáticas en las infancias, asimismo, se hace un llamado enérgico a la industria digital para asumir responsabilidad sobre controles de autenticidad, se insiste en la necesidad de fortalecer Marcos legales y de política pública, consolidar mecanismos de salvaguarda en redes sociales para eliminación urgente del contenido, y se invita a la ciudadanía y organizaciones de la sociedad civil para trabajar de manera conjunta en temas de alfabetización digital.
Ahora más que nunca tenemos que estar alerta de cómo garantizar nuestros derechos, y queda al descubierto que proteger la privacidad y la protección de datos personales es fundamental en la era digital.