En marzo de este 2024, ya estamos en plenas campañas electorales, los seleccionados candidatos por los partidos políticos respectivos, pasaron por los procesos de selección interna y se registraron, seguramente siguiendo las normas electorales.
Cada candidato realizara sus mejores estrategias para convencer al electorado de que deposite el voto a su favor. Algunos de los candidatos harán uso de la reelección, y eso si a ver cómo les va, porque algunos ni siquiera se dieron a conocer, ni para bien ni para mal.
También estarán otros “nuevos”, es decir o que nunca han participado en política, y llegan por ”el dedazo”, (aunque dicen que ya no existe).
Lo importante es conocerlos, ( de preferencia en persona),no solo en foto, también usaran los muchos medios electrónicos, pero deberán tomar en cuenta siempre su actitud, su voz ,las palabras que usen al expresar su programa de trabajo, ¿cómo lo va hacer?,¿con que?, y ¿cuándo va a entregar resultados de beneficio a los ciudadanos.
El candidato o candidata, debe de tener mucho cuidado en lo que expresa, en las palabras de sus intervenciones, porque representan un compromiso, que luego se lo pueden exigir. Sus palabras serán reflejo de su educación, de su cultura, pero también importante del conocimiento que tenga de los problemas y alternativas de solución, que tenga la comunidad.
Seguramente tendrá cuidado, al referirse, con respeto a los ciudadanos, para evitar distingos, o divisiones, recordando que todo el electorado, somos iguales porque somos todos mexicanos, Somos pueblo mexicano, iguales hasta por mandato Constitucional, no debe nadie referirse a los privilegios de unos u otros, ni manipular palabras, como la pobreza.
Los partidos políticos, evitar la estrategia de que sus candidatos, repitan las mentiras y pensar, que el ciudadano las va a creer como verdad, o la estrategia, de hacer creer que solo su candidato va a ser el ganador así nada más porque sí.
Hasta el día de la votación se conocerá la verdad, y para eso todavía falta, lo que si hay que insistir es en que se aceptara el triunfo y la derrota, porque lo primero es el el respeto al voto, y la dignidad de cada ciudadano.
Y así hay muchos “detalles”, que hay que cuidar, porque ahora el elector tiene mas poder para quitar al que no sirvió en su desempeño como su representante, y solo ocupo un lugar privilegiado en el Congreso de la Unión o Ayuntamientos o Cámaras Locales para servir a su jefe y dejarse manipular en beneficio propio.