“Es época de las mujeres”, eso se ha dicho repetidas veces, y según lo que se ve, efectivamente hay mas mujeres en los puestos de decisión publica, aunque hay muchas que están en lugares de poder, pero no tienen poder. Esa es una característica del machismo oculto, de quienes se dicen democráticos y a favor de la participación de la mujer, pero que saben que van a seguir mandando y manipulando para que ellos seguir con el poder.
En estos días, de esta “época de las mujeres”, en Mexico tenemos ya por primera vez a una mujer que va a ocupar la presidencia de Mexico, y en el Estado de Mexico, por primera vez a una mujer como Gobernadora del Estado, como en otros Estados de la Republica. (Que sea para bien).
Ahora, en el país vecino del norte, se menciona a una mujer para que posiblemente sea candidata a la presidencia de Estados Unidos de Ahora, eso sin duda significa un avance en el proceso histórico para el pleno reconocimiento a la mujer en igualdad de derechos que el hombre.
Pero, todavía hay un, pero, las manifestaciones del machismo oculto se presentan. En lugar de destacar, los atributos como la inteligencia, la capacidad, los resultados de desempeño en anteriores responsabilidades.
Se destaca en el caso de las mujeres, de todos los países, cosas sin mayor importancia, por ejemplo: “el peinado, que si se alacía el cabello, que si se lo pinta o no”. O bien, “que, si es casada”, “que, si tiene novio”, “que, si es divorciada,” “que se viste mal para los eventos oficiales”, “que, si tiene familia lejos, y la descuida, porque no le da tiempo de nada, solo esta ocupada en el trabajo,” “que, si se maquilla o no”,” que si esta gorda o esta flaca”.
Todo eso es machismo, y violencia política, además de interés por cosas triviales, no importantes para la responsabilidad que esta adquiriendo, porque cuando se trata de un candidato hombre, nunca se fijan en esos detalles, ya dan por hecho que solo por ser hombre es mejor que una mujer. como decía Sor Juana Inés de la Cruz “se creen que solo por el hecho de ser hombres son sabios”.
Ojalá que también en esta “época de las mujeres”, la crítica hacia las mujeres candidatas sea constructiva, no destructiva, eso ayudaría mucho no solo al avance de la democracia, sino al avance del país y de sus habitantes, creciendo más sanos en todos los sentidos y mas responsables de la tarea de participación y colaboración, unidos pueblo y gobierno. Gobierno, representado por una mujer o un hombre, que sin distingos de ninguna clase, solo se valore su capacidad y resultados en bien de Mexico.