Independientemente de los resultados de la jornada electoral, de ayer domingo 4 de junio, para elegir a la primera mujer como gobernadora del Estado de México, los desafíos en la entidad más poblada del país continúan vigentes, más allá de la estridencia de una elección.
Los ciudadanos mexiquenses tuvimos la oportunidad de expresarnos a través de las urnas, en una jornada electoral que -hasta las 13:30 horas del domingo- no marcaba algún incidente grave que pusiera en riesgo las votaciones. Una hora antes ya operaban 20 mil 432 casillas -equivalentes al 99.999 por ciento- y solo estaba pendiente el reporte de la casilla Básica, correspondiente a la sección 635, ubicada en Coatepec Harinas del distrito 9 con cabecera en Tejupilco.
Al elaborar este comentario aún no era posible conocer resultados. Al momento en el que usted lee este texto, ya habrá datos para saber quién de las dos contendientes (Delfina Gómez Álvarez o Alejandra del Moral Vela) obtuvo la mayoría de los votos para ser la titular del Poder Ejecutivo de la entidad más compleja del país.
Los problemas que deberá atender quien resulte ganadora definitiva de la elección (con más de 3.6 millones de votos, al menos) serán los mismos. Esos no cambian y conforme avanza el tiempo se complican.
Desabasto de agua, transporte público deficiente e inseguro, feminicidios, falta de oportunidades de educación superior para 7 de cada 10 jóvenes, inseguridad, creciente empleo informal, pérdida de competitividad económica frente a otras entidades, contaminación en aumento, sobrepoblación en centros penitenciarios, crecimiento urbano desordenado e ilegal, carencia de infraestructura en buenas condiciones y un largo etcétera de necesidades que, dependiendo de la región, se acentúan.
Cada una de las candidatas y los partidos que les apoyaron cumplieron -bien o mal- su tarea proselitista. Nos correspondió a las y los 12.6 millones de ciudadanos hacer valer nuestro derecho. Las estimaciones de los especialistas indicaban una participación que no superaría el 55 por ciento de la lista nominal. Deseamos que esa cifra sea más alta.
Así es la democracia. El voto de la mayoría de quienes participamos definió la ruta de los siguientes seis años y el hecho de que el Poder Ejecutivo estatal lo lidere una mujer, genera altas expectativas. Gane quien gane, el desafío de colocar al Estado de México en mejores condiciones que las actuales será una gran presión para cualquiera.
Ahora el reto será formar gobierno y rodearse de los mejores perfiles posibles. Que así sea, porque la gobernadora podrá tener la mejor voluntad de hacerlo bien y no necesariamente se logre, porque, entre quienes integren su gabinete y ocupen las principales posiciones de la administración estatal podrían no exisitr las mismas prioridades. Que sea para bien de las y los mexiquenses.
PERCEPCIÓN
Se decidió entre dos perfiles totalmente opuestos, acentuando la polarización que vivimos. Movimiento Ciudadano contribuyó a ello por no participar. ¿Cobardía o negociación? Porque responsabilidad no fue.
Profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UAEMex.
Presidente del Consejo Ciudadano del Sistema Mexiquense de Medios Públicos.
Twitter: @RJoyaC
