El 16 de noviembre de 2010, la gastronomía mexicana fue reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco, la cual define como un modelo cultural completo que comprende actividades agrarias, prácticas rituales, técnicas culinarias, costumbres y modos de comportamiento comunitarios ancestrales.
A lo anterior se agrega que es enriquecida por las distintas regiones del país, con un gran legado prehispánico e influencia de otras culturas como la española, francesa, africana, medio oriente y asiática, sin embargo ¿conoces cuáles son los datos curiosos que la distinguen?.
La comida mexicana genera en el país 1.7 millones de puestos de trabajo de forma directa, mientras que 3.8 millones de forma indirecta; además, se cuenta con 515 mil establecimientos, de acuerdo a la información dada a conocer en el portal de National Geographic en el artículo: 7 datos que debes conocer sobre la cocina tradicional mexicana.
Se estima que los turistas destinan el 30% de sus gastos en comida, tan solo en Estados Unidos es el tercer tipo de menú más popular y existen 18 rutas gastronómicas donde se dan a conocer más de mil 500 platillos y bebidas tradicionales de México a turistas nacionales e internacionales, las cuales abarcan: 155 destinos, 31 pueblos mágicos, 14 sitios naturales y culturales, 9 ciudades Patrimonio de la Humanidad y 25 etnias.
Además se detalla que el arte culinario mexicano es muy elaborado y está cargado de símbolos, entre ellos las tortillas y los tamales consumidos diariamente los cuales forman también parte de las ofrendas realizadas el Día de Muertos.
Los elementos básicos que no pueden faltar en cualquier platillo son: el maíz, los frijoles y el chile; métodos de cultivo únicos en su género, como la milpa, la cual se combina con otras plantas y la chinampa que es un islote artificial de cultivo en zonas lacustres.
La cocina tradicional mexicana también cuenta procedimientos de preparación como la nixtamalización (descascarillado del maíz con agua de cal para aumentar su valor nutritivo); y utensilios especiales como metates y morteros de piedra donde destaca el molcajete, pero también el comal de barro.