A pesar de que nos encontramos en verano, en gran parte del país las lluvias son el pan de cada día por lo que muchos de nosotros lidiamos con elegir un outfit oportuno para no terminar hechos una sopa o, en su defecto, no estropear nuestra ropa.

Pese a que la tarea parece algo sencilla en varias ocasiones se complica, sobre todo a la hora de pensar en la ropa que vamos a usar ya que los materiales con los que esta hecha determinarán si podrían aumentar o disminuir la cantidad de humedad, a esta seria de factores se le suma el cambio de temperatura a lo largo del día y la comodidad para desempeñar nuestras actividades diarias.

Ante dicho panorama surge la pregunta de ¿Cómo cuidar nuestra ropa durante la temporada de lluvias?

Aunque el tema parece algo banal y sin trascendencia, es necesario resaltar que en la actualidad es fundamental el cuidado de nuestra ropa para maximizar su durabilidad y disminuir nuestra huella de carbono ya que, como lo menciona la web de reventa estadounidense ThredUp, aunque el impacto medioambiental de nuestra ropa es muy difícil de calcular, se estima que la huella de carbono de la moda oscilan entre el 4% y el 10% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.

Hay que ser precavidos

Aunque no es algo cien por ciento seguro, se recomienda verificar el pronóstico del tiempo antes de salir de casa.

En caso de que haya probabilidades altas de precipitación lo recomendable es optar por prendas impermeables o que sean menos propensas a dañarse con el agua como chamarras y abrigos con tratamiento repelente al agua.

Un tip a resaltar de los expertos es que, si no cuentas con prendas que cuenten tecnología como waterproof (resistente al agua) o Gore Tex (impermeable y transpirable) puedes usar algún spray comercial para cubrir con una capa tu ropa favorita.

Protege tu calzado

Salir corriendo de casa y pisar un charco de agua es una de las situaciones más desagradables que te pueden pasar un lunes por la mañana por lo que lo más sencillo que puedes hacer es utilizar impermeabilizantes específicos para calzado.

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En caso de no contar con esto, la vieja confiable es recurrir a unas buenas botas las cuales pueden combinar con prendas casuales y con opciones más formales.

Secado adecuado de prendas

Tras una tarde lluviosa lo más importante es secar adecuadamente las prendas mojadas por lo que es recomendable evitar dejarlas en bolsas cerradas por mucho tiempo o guardarlas en tu closet inmediatamente ya que esto puede propiciar la aparición de moho y bacterias que pueden crecer dentro de las fibras de la tela, resultando en manchas y daños que pueden ser permanentes.

La solución más sencilla es colócalas en un lugar bien ventilado y, si es posible, exponerlas al sol para que se sequen completamente.

Aunque parece algo simple y sencillo, este método no sólo ayuda a cuidar nuestra ropa de la lluvia sino que también a mantenerla en buen estado y mantener un ambiente libre de humedad en casa.

Varias capas de ropa

En el caso de una emergencia las capas extra serán tu única salvación; sin embargo, es recomendable usar ropa que puedas ponerte y quitarte fácilmente para poder desempeñar tus actividades.

Bajo esta premisa es recomendable usar un saco con un suéter con el objetivo de mantener tus piezas principales secas. No obstante, recuerda seguir las instrucciones de lavado y secado para evitar que tu ropa guarde el desagradable olor a humedad.