La lluvia no paga boleto. Comienza a manifestarse una hora antes y deja su huella en las escalinatas de mármol, por eso, el público con localidades compradas para entrar a Bellas Artes al concierto De estreno a los 80 de Philip Glass, tiene cuidado de no resbalar y quienes se encuentran en la calle Ángela Peralta para disfrutar el show gratuito a través de la imagen gigante, aguardan tranquilamente.
La lluvia tampoco sabe esperar después de que dan tercera llamada y el músico norteamericano comienza a ejecutar sus primeras notas al piano. Antes, la cámara que proyecta fuera del Palacio el suceso, enfoca en el interior de este a rostros atentos a su celular que desaparecen en punto de la 20:10 horas cuando el artista entra a escena en medio de aplausos que agradece con una reverencia.
“Ira es el Filip Glass” dice un joven que se introduce con su novia a la carpa y se sienta a ver el recital vía screen. Se sorprende al ver las manos del ejecutante en dos tonos distintos y exclama ante su pareja, “ira parece que tiene tiña”, los de al lado que lo han escuchado con expresión de saber el motivo bicolor, no le aclaran que la parte blanca es una sustancia para que los dedos del pianista no resbalen de las teclas.
Son más de 20 minutos que dura la primera melodía que toca Glass (Metamorphosis dos, tres y cuatro) a los del templete no les han dado programa de mano, no obstante ponen atención aún los sonidos repetidos que a la mitad del tema se acoplan en un ritmo relajante.
Lo que sigue en la pantalla es la intervención del Cuarteto Latinoamericano con Saúl Bitrán, primer violín; Arón Bitrán, segundo violín; Javier Montiel, viola, y Álvaro Bitrán, violonchelo; Leonardo Heiblum, tabla, y Jacobo Lieberman en las percusiones, unas señoras se ponen a adivinar cuál de ellos es el más joven.
Un vendedor de tortas aprovecha el intermedio que sigue con más canciones como Songs from liquid days (Canciones de líquidos días) como si fuera la banda sonora de ese momento, película que cobra más forma cuando Diego Luna, el mismísimo Charolastra da voz a Wichita Vortex Sutra musicalizado por Glass.
La soprano Olivia Gorra y James Demster son otros de los invitados a la velada cuyo momento especial es la aparición de los músicos huicholes que interpretan la obra Hikuri (El cacto sagrado), contacto que se siente alineado con las raíces mexicas y que parece ha conmovido a Tláloc. El agua se detiene, no así la persistencia de los que han estado todo el tiempo al frente de la pantalla, estoicos, en una noche de emociones y cultura donde la música de Glass y el espectáculo presentado ha conmovido a todos, a los de adentro y a los del templete, un público en libertad.