Este 2023 el PRI se juega su existencia en la elección por la gubernatura del Estado de México, pues en caso de perder el cuatro de junio quedará como un partido "chiquito", pero de ganar sumará cien años gobernando a la entidad mexiquense, algo que ninguna dictadura en el mundo ha logrado.
El escritor Bernardo Barranco advierte que los comicios mexiquenses de este año serán el primer round rumbo al 2024, cuando se disputará la presidencia de la República y donde determinará la continuidad de la Cuarta Transformación, o el triunfo de la alianza PAN, PRI y PRD y alerta que sí podría haber fraude.
Durante una plática con El Sol de Toluca habla de su libro “El Regreso al Infierno Electoral”, en el cual once personas, incluído él, entre periodistas y académicos locales y nacionales, presentan un mosaico de planteamientos sobre el Grupo Atlacomulco, el tema de la corrupción, el papel del Instituto Electoral, el de los medios de comunicación, la violencia política en razón de género, entre otras.
Lo que está en juego
El texto, explica Bernardo Barranco, entra a las entrañas del poder, y sostiene que este año, más allá del discurso de que el Estado de México es la joya de la corona y el laboratorio nacional, la elección de la entidad está directamente vinculada con el proceso 2024, donde se determinará si la alianza PRI, PAN y PRD es capaz de hacer frente a Morena y a sus aliados.
“Si Morena gana, el panorama para la elección del 2024 va a tener un escenario muy propicio para la Cuarta Transformación y su continuidad, y está en juego la existencia del PRI, que desde el 2016 ha venido perdiendo fuerza geopolítica, ha tenido un declive, y perder el estado de México colocaría el PRI a nivel nacional como un partido chiquito, equivalente al PRD, con muy pocos espacios, financiamiento y credibilidad y estaría en vías de extinción.
"Si gana la alianza PRI, PAN, PRD esto va a determinar la hipótesis de una alianza electoral capaz de hacer frente a la Cuarta Transformación y a sus aliados; llegarían al 2024 con una actitud de mucha más certeza y revertiría el decaimiento electoral, por eso esta elección es un preámbulo, un primer round hacia la contienda del 2024 y está en juego la existencia del PRI".
No se entregará el Edomex
Ante una narrativa que se ha tratado de generar, en cuanto a la posibilidad de que el PRI entregue el estado de México, Barranco explica que esa reflexión es más de la élite, pues el gobernador Alfredo del Mazo no puede incidir en todas y todos los votantes, y hasta ahora el mandatario estatal ha tenido un papel dual: por un lado diplomático y abierto con el presidente Andrés Manuel López Obrador, pero sin dejar de entregar la tarjeta rosa.
Pensar que el tricolor pudiera entregar la entidad mexiquense, que nunca ha dejado de gobernar, advierte, sería firmar su acta de defunción, quedarse sin canicas para jugar y representaría una negociación catastrófica para esa fuerza política.
“Lo veo difícil, entregarlo sería como firmar una acta de defunción propia porque realmente se quedaría sin canicas, sin ese inmenso presupuesto que le da la Federación y significaría un reacomodo total, sería una negociación catastrófica al interior".
Bernardo Barranco considera que lo que se ha visto hasta ahora en el estado de ánimo del PRI es que iría por todo y que ya se echo a andar la maquinaria. "Ya empezó la guerra sucia, la guerra de las encuestas, ya empezaron a golpear, van a buscar cómo descalificar a la maestra ante la opinión pública como hicieron con Josefina Vázquez Mota, con Yeidckol Polevnsky, con Mendoza Ayala".
Algo claro para este 2023, explicó, es que el PRI por sí mismo no gana las elecciones, pues como partido en el 2017, sin el terremoto político del presidente Andrés Manuel López Obrador, obtuvo menos votos que Morena, pues éste fue el partido que más apoyos sumó.
"El PRI con todo su poder es incapaz de ganar la elección por sí mismo, requiere de aliados y el más importante es el PAN y su corredor azul”.
El sol azteca, dijo, es partido chiquito y es una incógnita saber la fuerza que tiene, mientras el líder de Movimiento Ciudadano, Juan Zepeda, no ganará, pero será importante ver a quién le puede restar votos.
El ex consejero electoral previó que la elección del 2023 tendrá mucha guerra sucia.
Podría haber fraude
Para Bernardo Barranco existe la posibilidad de que se cometa un fraude en la elección del Estado de México, pues asegura que seis de siete consejerías electorales están vinculadas al sistema, pero además el Instituto Electoral ha mostrado laxitud ante la propaganda y los espectaculares que se colocaron desde el año pasado, pues ni siquiera hizo llamados a conducirse apegados a la ley, y en las vocalías, la mayoría son las y los mismos de siempre.
"Han sido laxos con los espectaculares, con el argumento de que no había iniciado el proceso electoral, ni había llamados al voto y en las juntas (…) solamente se renovó con gente nueva el 13% y quienes quedaron en su mayoría son los mismos.
"El PRI no solamente incide en el Consejo, es dueño del consejo, pero también es dueño lamentablemente de las juntas distritales y ahí hay un sesgo criticable de parte de la autoridad electoral”.
El primer libro denominado "El Infierno Electoral" se basó en las elecciones del Estado de México del 2017 sobre las “trapacerías” que vieron, pero este segundo libro busca narrar lo que está pasando, por lo cual su naturaleza es diferente con tópicos diversos.
Entre quienes tambièn participan están Gabriel Corona, Verónica Veloz, Teresa Montaño, Israel Dávila, Enrique Gómez, Álvaro Delgado, Julio Astillero, Alberto Aziz, Francisco Cruz y Fabrizio Mejía.