Una colección de grabados e ilustraciones en grafito, lápiz y técnicas mixtas, acompañadas por textos de escritores y poetas de la literatura universal, se despliegan para el deleite de los visitantes del Museo del Alfeñique en la sala de exposiciones temporales dispuesta en el primer nivel del recinto cultural.
La colección titulada “Siempre presente, nunca visible”, retrata la visión particular del artista Eric Camacho Gutiérrez acerca de la muerte y sus múltiples representaciones a lo largo de la historia. Desde catrinas tradicionales, ataviadas con flores e indumentaria tradicional mexicana, hasta figuras fantasmagóricas, tal y como se le plasma a la muerte en las culturas anglosajonas, la muestra ofrece un recorrido por la historia, el arte y la literatura dedicada a esta cosmovisión humana.
Alrededor de doce obras pictóricas componen este montaje, acompañadas de breves textos referentes a la muerte de autores como Séneca, Francesco Petrarca, Jaime Sabines, Epícuro de Samos, Mario Benedetti, Bob Dylan, entre otros.
“Este es un paseo a través del sueño de la muerte y de un sueño de muerte. Doce visiones oníricas donde la imagen espantosa de la muerte, entre inanimado, intangible, infatigable, informe, infame, comulga con la materia de la que está hecha la mortal esperanza”, da la bienvenida a la audiencia.
Las ilustraciones en “Siempre presente, nunca visible”, recuerdan que la muerte es “un grotesco ángel corpóreo, demonio de etérea belleza” o un “efímero masculino, femenino eterno; divinidad entronizada en las más bajas alturas”, puesto que cada definición depende enteramente del cristal con que se mire.
Sin lugar a dudas la colección de Eric Camacho Gutiérrez ofrece una visión sombría que al mismo tiempo recuerda a quien observe que el concepto de la muerte es un “rito, ofrenda, invocación, conocimiento, sabiduría, iluminación, perfección, simetría y equilibrio”.
Frases:
1, ¿Cuántas muertes más serán necesarias para darnos cuenta de que ya han sido suficientes? Bob Dylan.
2, “Alguien me habló todos los días de mi vida al oído, despacio, lentamente. Me dijo: ¡vive! ¡vive! ¡vive! Era la muerte” Jaime Sabines
1, “Después de todo la muerte es sólo un síntoma de que hubo vida” Mario Benedetti.
CAJAS DE DATOS
Los fondos recaudados contribuirán a la reconstrucción de comunidades damnificadas en el Estado de México.
La donación es de 300 pesos por persona e incluye un recorrido por el lugar, espectáculo de luces, concierto y brindis/ degustación.
Participarán los artistas Danta Alcalá, Gahuer Carrasco, Sophie Tanapura, James Demster y Catherine Barrow de México, Brasil, Tailandia y Estados Unidos.