Uno de los montajes teatrales sin precedentes que sin duda hay que ver es “Frida de plata”, una magnífica obra sobre la gran Frida Kahlo, personaje que sostiene un diálogo bastante interesante consigo misma, entre la mujer de carne y hueso, y aquella que ha traspasado fronteras como un símbolo idolatrado no sólo por su imagen o escasa obra de 200 piezas, también por su dolor y vida a lado de Diego Rivera.
Esta puesta en escena escrita por Stephania Nolasco, bajo la versión libre y dirección de Jesús Angulo, nunca antes vista, ni estrenada, pero por primera vez en temporada logra tocar fibras que conducen a diversas reflexiones, así como emociones inmersas en la risa, el drama, incluso el dolor e inevitablemente en el disfrute total de una obra que no le pide nada a otras de gran producción o de reparto comercial.
Se trata de una obra envuelta en un misterio, la curiosidad y las ganas de saber más sobre está afamada pintora mexicana, de quien cuyas cartas reales son citadas en esta propuesta teatral que combina las espléndidas actuaciones de dos actrices con desgarradoras interpretaciones musicales en vivo, de un exquisito repertorio emblemático mexicano que acarician el sufrimiento de Frida con temas como Paloma Negra, Zandunga y La Llorona.
En entrevista, el director de la obra, Jesús Angulo, dijo que esta propuesta está basada en las cartas que Frida le envió a Diego, no sólo para abordar la historia de ellos dos, sino de la personalidad de ella. Por lo que se dispusieron a desarrollar esos puntos de vista muy particulares como la maternidad frustrada, la estructura social represora y discriminadora de las mujeres, entre otros temas fundamentales.
Como dice Frida en la obra, a mí qué chingados me importa que me agarren de pretexto para justificar la vida de otros. Como ha sido y como es con los íconos nacionales, a saber cuál era la historia humana e interna de ellos y nomás se les toma para usarlos de bandera con algún fin y eso era lo que nos interesaba
El origen de la obra
Stephania Nolasco, dramaturga del montaje, quien da vida a Magdalena Carmen Frida Kahlo Calderón, nombre real de la pintora, es decir a la Frida humana, la que sólo es una mujer; reveló a El Sol de Toluca que hace muchos años empezó a escribir la obra que declara que por circunstancias de la vida no se pudo concretar con ningún director ya que sentía que su trabajo no era tan bueno como para llevarlo a escena, entonces dejó pasar el tiempo y cuando volvió a leer el texto ya no le gustó.
“No me gustó porque en ese momento yo era muy fanática de Frida Kahlo, demasiado. Y entonces cuando lo leí dije qué fuerte y que feo, que desvirtuemos a una mujer así, porque era un ser humano. Entonces vi a mi alrededor y me di cuenta que era como el boom, es una marca y todo. Fue cuando me pregunté ¿qué tanto de todo esto es real, de lo que conocemos de Frida Kahlo? Hay mucha gente que dice que quiere ser como Frida Kahlo y me dije '¿es en serio, que quieren sufrir lo que ella sufrió?', no es por ser la mártir, pero estar enferma no está padre. Entonces es algo que consumimos creo yo, a base del morbo. Todo eso fue lo que me atrajo a retomar el texto”.
Nolasco destacó que si bien Frida Kahlo fue una gran mujer, la hemos “endiosado”.
Esta obra fue el hablar de esas cosas que son importantes para mí y creo que muchas personas, pero en especial mujeres, comparten conmigo, porque muy pocas personas te dicen la verdad de las cosas. Por ejemplo toda esa idealización de que ser mamá es maravilloso, sí lo es, pero también es una ‘chinga’, con perdón de la palabra, es trabajar por ellos, vivir por ellos, es que una persona dependa de ti al mil por ciento
“El texto de la obra es un punto de vista, no sé si crudo, pero sí honesto”, concluyó.
La sensacional obra teatral se encuentra en temporada de jueves a sábado a las 17:00 horas en el teatro de cámara Esvón Gamaliel, ubicado al interior del Edificio de Rectoría en Toluca, el costo de entrada es de 30 pesos los jueves de teatro.