En el segundo día de actividades la Filem vivió una velada inolvidable al tener como concierto de gala el segundo programa de la temporada 141 de la Orquesta Sinfónica del Estado de México (OSEM), que tuvo como director huésped y solista al carismático músico mexicano Horacio Franco, quien cautivó con su personalidad, entrega y pasión por la música.
Cabe resaltar que Horacio Franco es uno de los artistas mexicanos más reconocidos y aclamados por la crítica internacional e incluso diversas personalidades lo reconocen como uno de los representantes más dignos de la flauta a nivel mundial motivo por el cual aseguró sentirse orgulloso de trabajar con la OSEM.
"Ha sido la mejor semana de mi vida al trabajar con esta maravillosa y portentosa orquesta, todos y cada uno son grandes músicos, seres maravillosos, en el Estado de México tienen el orgullo y el honor de tener a la mejor orquesta del país, estoy muy orgulloso de trabajar con ellos como director y solista", expresó.
El recital abrió con la Serenata No 10 mejor conocida como la "Gran partita" para vientos de Wolfgang Amadeus Mozart, compuesta por siete movimientos que Franco dirigió con pasión y en cuyo rostro su sonrisa denotaba que también disfrutaba del recital.
Posteriormente, como solista interpretó la "Síntesis de las cantatas BWV 29 y 35 y el preludio BWV 997, de Johann Sebastian Bach, obras con las cuales Franco se ganó el corazón de los presentes por su extraordinaria ejecución con la flauta, la pasión impuesta en cada nota musical y su intensa personalidad.
En la última parte interpretó la Sinfonía No. 4 de Franz Schubert, en cuyos cuatro movimientos, Franco se divirtió durante su dirección, bailó y nunca dejó de sonreír.
El material que hicimos en este programa es poco común, hay que hacer más Mozart, más Schubert, con una orquesta tan buena.