“Así como es un don de los hombres de gran talento decir muchas cosas en pocas palabras, es por desgracia en los sujetos de pocos alcances hablar mucho para no decir nada.” (Molière)
No hay líder que no sepa expresar sus ideas con claridad, pero eso es un arte.
Parte del liderazgo es hacerse entender, cuando un líder expresa un mensaje debe tener claro cuál es la meta de éste, un mensaje solo tiene 4 objetivos generales: persuadir, motivar, informar o entretener, esto de acuerdo a la metodología de aprendizaje de Toastmasterd international.
Un líder debe saber qué respuesta busca en sus seguidores cada vez que hace uso de la palabra, tenemos la idea errónea que un líder es un gran motivador y que siempre debe estar inspirando a sus seguidores y nada más alejado de ello.
En realidad, un líder pasa gran parte de su tiempo informando resultados, estrategias, cursos de acción, decisiones difíciles y para informar también es necesario contar con técnica, porque no es lo mismo informar un buen resultado, que un efecto adverso para el propósito del grupo que se liderea.
Un líder debe saber estructurar su mensaje con una entrada, un cuerpo y una salida, debe saber respetar el tiempo de los demás al hacer uso de la palabra, un guía debe ser un maestro, para entender lo que es necesario decir y cómo decirlo en el momento justo; si es forzoso informar que lo haga, cuando de motivar se trata que sea un vendaval de inspiración, si el propósito es persuadir, que tenga los argumentos necesarios y si solo busca entretener, entonces que haga uso de su repertorio histriónico para contar historias y que su tribu pase un momento agradable.
Saber hablar es un arte, conectar a través de la palabra oral, saber transmitir un sentimiento, utilizar los ademanes que fortalezcan la alocución es trascendental para el líder, así que entre los puntos que debes tener si aspiras a ser un líder es perfeccionar tu mensaje utilizando la palabra hablada.
Un líder sabe expresar su mensaje con fuerza, determinación y dirección.
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Abrazos, ¡todos!
