¿Cuánto cuesta ser un deportista de alto rendimiento?

En el caso de los marchistas concentran sus gastos en equipo deportivo, campamentos, suplementos alimenticios, transportes y atención del equipo multidisciplinario, entre otros rubros

Domingo Fernández | El Sol de Toluca

  · jueves 22 de diciembre de 2022

FOTOS: ARCHIVO | EL SOL DE TOLUCA

Los deportistas de alto rendimiento que se preparan para afrontar un ciclo olímpico requieren de importantes sumas de dinero para solventar los gastos de alimentación, equipo deportivo, campamentos, viajes, servicios del personal multidisciplinario.

Un atleta que compite en eventos clasificatorios como mundiales, Juegos Centroamericanos y Panamericanos hasta llegar a los Olímpicos requiere en México entre 1.5 y 3.5 millones de pesos anuales dependiendo del deporte.

Tan solo para lo que fue el ciclo olímpico de Tokio que en esta ocasión fue de cinco y no cuatro años debido a la pandemia del Covid-19 fue de entre mil 300 y mil 700 millones de pesos, de acuerdo al Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento, que existió hasta junio del 2021.

En el caso de la caminata, Germán Sánchez, ex marchista olímpico y actual entrenador en la Universidad Autónoma del Estado de México, detalló que tan solo los atletas que participan en justas como Juegos Nacionales Conade, los gastos son absorbidos prácticamente en su totalidad por los padres de familia.

“En un mes se necesitan tenis de entrenamiento (2 mil pesos) y competencia (2 mil pesos), ropa de entrenamiento unos 3 mil pesos, alimentación 4 mil pesos, traslado en transporte público de su casa a los lugares de entrenamiento uno 50 pesos, sumado a la hidratación de cuando menos un Gatorade otros 50 pesos”.

“A lo anterior le tienes que sumar la inscripción a las competencias nacionales, si es una al mes 300 pesos, las vitaminas al mes cuando menos 2 mil pesos, que da un total de 13 mil 400 pesos al mes para atletas que aspiran a una medalla nacional, una inversión considerable de los padres de familia”, refirió el entrenador.

Sin embargo el panorama cambia cuando son atletas que están en un ciclo olímpico y tienen que acudir a competencias como Juegos Centroamericanos, Panamericanos, Mundiales, en ese momento ya deben existir apoyos, aunque la beca internacional para un atleta mexiquense es más simbólica porque es de solo 3 mil pesos mensuales.

“Si el marchista ya está clasificado para los eventos internacionales se tiene acceso a más beneficios, pero no en todo, faltan el material deportivo o vitaminas, en el caso de un atleta de nivel mundial como Nadia González aumento en los suplementos alimenticios ya que asciende a unos 6 mil pesos”, indicó.

El medallista de oro en los Juegos Panamericanos en República Dominicana 2003, abundó que cuando los deportistas acuden a las justas, el estado al que representa el atleta paga el boleto de avión y uniforme, mientras que el comité organizador que es la Conade la alimentación y hospedaje.

“Aplica de la misma forma cuando son campeonatos mundiales, Juegos Centroamericanosy Panamericanos, la Federación y Comité Olímpico pagan el boleto de avión y uniforme, en tanto el comité organizador el hospedaje y alimentación, pero aquí el tema es el de la preparación, el proceso para llegar, muchos como entrenadores terminamos por poner el transporte, gasolina, hay que mandarlos con algún fisiatra”, señaló.

Germán Sánchez refirió que en este momento tiene a una atleta que está en rehabilitación con un fisiatra, al mes son cinco consultas de 500 pesos cada una.

Para dimensionar también los gastos de un atleta de alto rendimiento, recordó que durante abril del 2021 no hubo recursos federales para el marchista olímpico Omar Zepeda para asistir a la Copa Panamericana en Ecuador donde se requerían cuando menos 30 mil pesos.

Los que fueron a Eslovaquia ese año en busca de la marca olímpica José Leyver y Luis Amauri Bustamante se gastaron 40 mil pesos de su bolsa y no dieron el registro, otro de los riesgos en el proceso.

Otro de los temas que generan importantes gastos son los campamentos nacionales e internacionales, ya que en la mayoría de los casos se necesitan cuando menos una semana.