Con polémica del árbitro central, el Toluca perdió la oportunidad de “colgarse” de la cima de la clasificación general tras caer 1-0 frente a las Chivas Rayadas del Guadalajara, en actividad de la jornada tres en la Liga MX.
El gol que ponía en igualdad de circunstancias a Chivas y Diablos, increíblemente fue anulado por el silbante José Antonio Pérez Durán tras una larga revisión apoyada con el videoarbitraje, pues aunque el esférico rebasó completamente la línea de meta, se decidió que no era válido y ello le quitó la oportunidad al cuadro mexiquense de rescatar un punto en el encuentro.
Duelo en la cima que no quedó a deber. Movido desde el silbatazo inicial y con aproximaciones que ahogaron una y otra vez el grito de gol de los más de 30 mil aficionados que se dieron cita en el estadio Chivas.
Al minuto 2, Pablo “Pitu” Barrientos intentó sorprender al arquero Raúl Gudiño y en tiro de esquina se quedó a nada de abrir el marcador con gol olímpico, sin embargo, el esférico se estrelló en el larguero para buena fortuna del chiverío.
Cinco minutos después, el mismo Barrientos cobró rápido una falta que le cometió fuera del área grande Jair Pereira y pateó el esférico a la llegada por la banda del defensor Osvaldo González que remató de cabeza, aunque sin la fuerza suficiente para superar al arquero de las Chivas Rayadas y se fue una clara del Toluca.
Con menos dinámica, pero mucho ímpetu, el encuentro superó los primeros 30 minutos con jugadas cortadas en medio campo gracias a faltas innecesarias que dieron un respiro a los jugadores, mientras que el silbante Pérez Durán intentó bajarles las revoluciones con tarjeta amarillas.
Al minuto 33, Alfredo Talavera se vistió de héroe en jugada de Isaac Brizuela que se quitó la marca de Fernando Tobio, remató el segundo poste, hasta donde el arquero mexiquense se lanzó para salvar su marco cuando ya se coreaba el primero del Rebaño.
En la segunda mitad, Barrientos dejó el terreno de juego por una molestia muscular y su lugar fue ocupado por el colombiano Felipe Pardo.
Hasta el minuto 57, el Rebaño abrió el marcador. Alán Pulido, que había tenido un desempeño discreto, se quitó la marca entre tres defensas choriceros y sacó “fierrazo infernal” raso y pegado al poste derecho. Alfredo Talavera no alcanzó a reaccionar y cayó el 1-0 en favor de las Chivas.
En desventaja, Hernán Cristante buscó mantener el barco a flote con el ingreso de Carlos Esquivel, por Luis Ángel “Quick” Mendoza.
José Antonio Pérez Durán se robó el show de la noche al anularle un gol legítimo que inclusive revisando la jugada con el VAR decidió que no era válido, ante la incredulidad de los Diablos, Hernán Cristante, el cuerpo técnico y jugadores de recambio que reclamaron airadamente la decisión final del silbante central.
El marcador ya no se movió y los nueve minutos de agregado por el tiempo que se perdió en el gol anulado, se consumieron entre agresiones en medio campo que terminaron por cortar el ritmo en uno de los duelos más atractivos de la jornada tres de la Liga MX.