El trabajo continúa para definir los protocolos sanitarios y tener en las mejores condiciones las albercas en el Estado de México para el regreso a la actividad deportiva, sin embargo esto dependerá del color de semáforo por el Covid-19, adicionalmente se prevé que la apertura será de manera escalonada porque cada municipio tiene un contexto diferente.
David Quintero Azuara, presidente de la Asociación de Natación del Estado de México, detalló que están trabajando de manera coordinada con los municipios y pendientes de lo que digan las autoridades federales para el regreso a la nueva normalidad.
“Estamos preparando todo para el regreso pero dependerá de cada municipio y en que situación se encuentre en relación al Covid-19, eso indica que la apertura será de manera escalonada, aunque consideramos que para agosto se comenzará a tener el acceso”, indicó.
Al momento son más de 50 clubes afiliados a la asociación estatal principalmente del valle de México, pero existen algunos privados, no obstante en este momento todos deben trabajar en sincronía para evitar los contagios por el coronavirus en el proceso de la reapertura.
Quintero Azuara detalló que entre las medidas sanitarias que deberán acatar deportistas y entrenadores es que nadie utilice los baños, regaderas, no acudirá público, el atleta solo podrá ser acompañado por un máximo de dos instructores.
“Los nadadores llegarán con su traje de baño, antes del acceso les tomarán temperatura y proceso de sanitización, después de la competencia la salida será en un lugar diferente para evitar a los que van llegando, será totalmente diferente a lo que estábamos acostumbrados”, precisó.
A todo lo anterior se suma la sana distancia y en el caso del cubrebocas lo deberán portar hasta previo poco antes de iniciar su respectiva prueba.
El único procedimiento que no cambiará es en relación al agua, después de revisar que está en óptimas condiciones para nadar viene después calentarla o enfriarla.
Los deportistas están en stand by, trabajando desde casa para mantener la forma física, como en el caso de los juveniles que van para los Juegos Nacionales Conade programados para octubre de este año, pero que se verán afectados porque para llegar en buen nivel requieren de al menos 12 semanas de entrenamiento.
“Los deportistas están afectados porque no tienen espacios para entrenar y tampoco hay comunicación con la Federación ni Conade, aunque está la posibilidad que se realicen en Nuevo León creo lo más conveniente es que se cancelen, no hay tiempo suficiente para poner los muchachos a punto, sin embargo hay que esperar el comunicado oficial”, indicó.