El boxeador mexiquense Óscar Salgado, múltiple medallista en Olimpiada Nacional, triple campeón del extinto torneo “Guantes de Oro” y ex seleccionado nacional, mantiene su paso firma en el pugilismo profesional y en este 2022 el objetivo es comenzar con el triunfo.
Tras un destacado paso en el pugilismo amateur (con 200 combates en promedio) que le dio las herramientas necesarias para sobresalir en el boxeo de paga, logró mostrar en sus cuatro combates que lleva que va por buen camino rumbo a los grandes escenarios.
Óscar Salgado debuto con buenos resultados durante noviembre del 2019 , después se suspendieron las actividades debido a la pandemia del Covid-19.
Durante el 2021 Salgado Favela sostuvo tres combates, con saldo de dos triunfos y un empate; en abril noqueó a Luis Alcántara, en agosto se impuso por puntos a Óscar Peña y en octubre pasado empató con Juan Bustamante, todos los pleitos tuvieron lugar en territorio mexiquense.
“El 2021 fue un poco difícil por lo de la pandemia, no había donde entrenar por lo que tuvimos que buscar espacios, el trabajo fue bueno porque no hubo derrotas, incluso el empate fue con sabor a victoria porque me alzaron la mano como ganador pero a la hora de subir el resultado estaba como empate”, indicó.
El prospecto de 22 años originario del municipio de Zinacantepec, Estado de México; ha mostrado un boxeo eficaz, producto de años de trabajo arduo para conquistar su sueño, que al igual que muchos jóvenes es el de ser campeón del mundo.
En su primer compromiso del año hizo gala de su manejo de mano izquierda y con certeros golpes al cuerpo dominó al capitalino Luis Enrique Alcántara, quien se fue a la lona con un contundente upper.
Ante Óscar Peña fue un combate de poder a poder donde ambos peleadores mostraron su calidad competitiva, sin embargo después de los cuatro saltos pactados, los jueces dictaminaron 39-37, 38-38 y 39-37 en favor del de Zinacantepec, Estado de México.
Tener un respaldo de un promedio de 200 combates en el boxeo amateur no es suficiente para consolidarse en el profesionalismo.
“Es un boxeo muy diferente, en el amateur se busca el puntaje con la explosividad pero con menos fuerza y en el profesional se utiliza la potencia, se persigue más al rival, sin embargo me ha servido para adaptarme al pugilismo de paga y creo que vamos bien”, indicó Salgado.
Detalló que como boxeador amateur era más técnico, rápido, ya en el profesional es más certero, los golpes hacen más daño y falla menos.
El discípulo del profesor Carlos Duarte, es uno de los exponentes de la escuela cubana que ha traído Duarte a México; y desde su paso por el boxeo olímpico dejó ver un talento nato que le augura un gran futuro a este pugilista que recién se graduó como licenciado en Administración de Empresas por la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM).
Aunque el calendario para este 2022 no está definido, el peleador mantiene la intensidad del trabajo para afrontar los compromisos, y comenzar el año con el triunfo le brindará una buena dosis de motivación.
“Por el momento no tenemos pelea programada para empezar el año pero ya estamos entrenando, debemos llegar con el mejor nivel, el objetivo es no perder ningún combate por eso no he dejado de trabajar”, concluyó Óscar Salgado.