La marchista mexiquense Guadalupe González sabrá el 30 de junio si debe cumplir con la suspensión de cuatros años que le impuso la IAAF (Asociación Internacional de Federaciones Atléticas) por dopaje, o bien, si el fallo del TAS (Tribunal de arbitraje deportivo) será a su favor.
Por cuarta ocasión la decisión final fue aplazada después que la última fecha para saber el futuro de la atleta estaba programado para el mes de marzo pasado,;sin embargo, la pandemia por Covid-19 obligó a atrasar nuevamente el caso.
La subcampeona olímpica y mundial de marcha partirá del fallo para seguir aspirando a una eventual clasificación a Tokio 2020, una vez que la justa se pospuso para el verano del 2021 y la de Naucalpan, Estado de México, tendría posibilidades de refrendar su éxito en Río 2016.
"Lupita" fue inhabilitada cuatro años después de dar positivo a la sustancia trembolona en un control anti dopaje, ya que ésta se encuentra en la lista negra de medicamentos prohibidos y su consumo se asocia principalmente para el aumento de masa muscular. Dicha muestra fue tomada en 2018.
La primera audiencia para atender la apelación de González fue en noviembre de 2019 y no resultó favorable, por lo que a partir de ese momento han habido una serie de inconsistencias que han obligado a ampliar el caso, incluso la marchista se vio obligada a cambiar a su equipo de abogados.
Tras la primera audiencia se amplio el plazo a diciembre del 2019, después a enero del 2020, luego a marzo de este año y el capítulo final está reprogramado para el 30 de junio próximo.