Ignacio Ambriz no baja los brazos. El director técnico del Toluca alabó los arrestos de su equipo para salvar el duelo de ida que perdían esté jueves frente a Santos.

Del encuentro de este jueves, Nacho analizó, "después del 2-0 no pudimos girar al equipo. Había espejo en la cancha y no podíamos circular, nos vimos vulnerables. Hago ajustes en el segundo tiempo para contrarrestar su parado y el equipo se enchufa otra vez. Para la gente será un partidazo por los goles, pero hay muchos errores. Son 90 minutos con un resultado favorable, peor allá va a ser difícil. Nosotros debemos de tener el temple y carácter para ir a jugar y luchar durante los cien minutos. Hacerlo bien y esperar estar en la siguiente ronda”.

Sobre el arbitraje y los cambios que se vio obligado a realizar para salvar la noche, el capitalino explicó, “nunca hablo del arbitraje, para mi ha hecho un buen trabajo, no tuvo que ver en las polémicas que se dieron. Tengo que tomar decisiones en los cambios, hoy le toco a Leo porque el equipo necesitaba reestructurarse, si hubiera perdido me estuvieran reclamando, y ahora se dio el resultado con los cambios. La calidad cambia con alguno que otro jugador, pero hoy el equipo cambia con los movimientos”.

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En cuanto a la vuelta de esta serie, el estratega escarlata descartó que todo esté dicho.

“Va a ser un partido más bravo, es tener paciencia porque no es mucha la diferencia. En una liguilla no es normal que se hagan seis goles. Partidazo por los siete goles, pero para nosotros no. Creo que la afición de ellos va a salir con todo y un gol es muy poca diferencia. Tenemos que prepararnos bien porque será un partido de mucha intensidad”, puntualizó.