Equipos de la Liga de Futbol Amateur de Veteranos de San Cristóbal Huichochitlán, en Toluca, no retomarán actividades el próximo domingo 9 de agosto; tras la reunión de la mesa directiva, se concluyó que no hay las condiciones sanitarias, por lo que las semifinales deberán esperar.
Juan Jiménez, presidente de la liga, reconoció que los equipos están desesperados por regresar al campo, pero la pandemia del coronavirus no ha disminuido y retomar el torneo implica poner en riesgo a los jugadores y público que llega a ver los partidos, lo que sería ir en contra de las recomendaciones de salud.
“Están pendientes las semifinales donde de enfrentarán Santos ante Necaxa y Nuevo León que se medirá a Salamanca, son partidos que están pendientes desde hace un mes, los jugadores consideran que por estar en semáforo naranja ya todo está normal y esto no es así, la pandemia no ha disminuido, así que al final se decidió que no habrá partidos”, señaló.
La decisión se tomó el martes 4 de agosto tras la reunión de la mesa directiva, Juan Jiménez manifestó que no fue sencillo cancelar los encuentros, sin embargo entendieron que en estos momentos la salud es prioridad.
Hace poco más de un mes y en pleno semáforo rojo por el Covid-19, jugadores realizaron un partido amistoso en el campo El Pino, en pleno centro de la comunidad sin avisar a la liga, lo que ocasionó que llegaran las autoridades municipales para detener el juego que era observado por una buena cantidad de aficionados.
“Me hablaron del Ayuntamiento de Toluca para invitarme a estar al pendiente de que no se realicen encuentros porque se pone en riesgo a mucha gente, pero no es fácil, hay que hablar mucho tiempo con ellos para hacerles ver que el suspender los partidos es por su bien”, señaló Juan Jiménez.
Otras actividades también las ha detenido, Juan Jiménez es entrenador de boxeo por lo que también ha invitado a sus púgiles a trabajar desde casa, cuando las condiciones mejoren podrán regresar al gimnasio para continuar con la preparación.
En la comunidad también se suspendió la feria, pero la circulación de la gente por las calles no disminuye, lo que dificulta afrontar de manera más eficiente la pandemia.