Construir con LEGO como una manera de desarrollar la creatividad en el juego individual y colectivo en los niños y niñas es bien sabido, sin embargo usarlo como un método para acercarse a la ciencia es algo que recientemente se hizo.
Científicos de la Universidad de Göttingen, Alemania, lograron construir un microscopio utilizando únicamente piezas de smartphones en desuso y de LEGO.
El dispositivo de alta resolución fue utilizado por niños de 9 a 13 años, quienes aumentaron significativamente la comprensión de lo observado, que motivó a los investigadores para acercarse a los menores despertarles un mayor interés por la ciencia desde temprana edad.
En el caso de las piezas de los celulares lo que se utilizó fueron los lentes de las cámaras, fue una importante ventaja porque tienen una alta calidad lo que permite construir un microscopio similar a los profesionales pero con un costo mucho menor.
De manera adicional diseñaron un tutorial para guiar en el proceso de la construcción, a la par aprenden sobre las características ópticas del dispositivo, de acuerdo a lo publicado por Notipress en el artículo titulado: Investigadores construyen microscopio con LEGO y smartphones para niños.
El autor principal del proyecto es Timo Betz, quien detalla en el documento que se creó un artefacto totalmente funcional y de alta calidad con lo cual los niños aprendieron significativamente sobre la microscopía.
El equipo de trabajo estuvo atento durante el experimento y en contacto constante con los niños sobre sus avances desde la construcción del dispositivo hasta las observaciones para comprender el mundo microscópico.
Construir las partes principales del dispositivo fue de lo más complicado, no obstante después los niños comenzar a jugar con el aparato y adaptarlo a sus propias necesidades.
Sin embargo los investigadores no descartaron que el juguete sea una buena herramienta para los adultos que les permita acercarse a la ciencia, lo que puede ser un aliciente adicional para los niños.
El modelo escalable podría ser empleado en aulas y hogares de todo el mundo e inspirar a niñas y niños sobre la ciencia, mejorar el acceso al instrumento científico podría cambiar el rumbo de la educación básica.