El sueño del Toluca sub 17 de avanzar a la gran final se derrumbó en tiempo de compensación cuando Necaxa vino de atrás para dejar el marcador 3-2 y colarse a la gran final de la categoría donde enfrentará a Puebla.
Los Diablos de Miguel Almazán estuvieron dos veces en ventaja, incluso el empate a dos tantos le favorecía por los tantos de visitante pero al minuto 91 se acabó el festejo.
El partido no repartió la posesión del esférico, sin embargo, los mexiquenses sacaron la mejor ganancia de los errores de su rival que en dos balones parados permitieron que cayeran los goles que los pusieron contra la lona.
Al minuto 2 Toluca sub 17 ya lo ganaba. Louis Derbez aprovechó un descuido de la defensa hodrocalida y frente al marco mandó a guardar el esférico al fondo de la redes para el 0-1. Gol de vestidor que avivó la esperanza de enfilarse a la gran final.
Dos minutos después Diego Abitia se dio el lujo de dejar escapar lo que se cantaba como el segundo de la visita, aprovechando el momento anímico de los Diablitos.
Tuvieron que pasar 30 minutos de juego para que Necaxa reaccionara y emparejara los cartones 1-1. El partido vivía sus mejores momentos sin un claro dominador, pero sí buen futbol.
Antes de que terminara la primera mitad, Pablo Jurado mantuvo el empate tras un tiro de castigo de los rayitos que llevaba destino de gol y que el arquero supo resolver para mantener a salvo su puerta.
Con la obligación de buscar un segundo tanto que les asegurara la final, Toluca se fue al frente, a matar o morir y la fórmula rápido le dio frutos. Al 63' retomó la ventaja que lo enfilaba a la victoria gracias a Mauricio Martínez que concretó el 2-1. Después de un tiro de castigo, el arquero rechazó y el juvenil pateó con rencor para irse nuevamente arriba y con esto de darse una eventual igualada, los goles de visita le darían el pase a los rojos
Los Rayos se negaron a morir y al 75 le dio alcance a los Diablos. Brayan Casas, en tiro de castigo la defensa toluqueña dejó el esférico muerto frente al arquero Jurado que no pudo evitar la caída de su marco. El resultado seguía favorable a los mexiquenses.
Los choriceros sólo debían congelar el balón para cuidar el resultado pero el tiempo de compensación tomó tintes de dramatismo al '91 cuando vino el gol de Necaxa que mató las ilusiones de los Diablos Rojos. Se perdió la marca y sorpresivamente los locales hicieron el tanto con el que liquidaron a los Diablitos sub 17.
Necaxa disputará la gran final frente a un también sorprendente Puebla que eliminó al favorito, Atlas de Guadalajara.