Raunel Peña, quien llevó el parapente al municipio de Luvianos, mantiene viva la actividad de este deporte extremo cada fin de semana pese a que por el momento no se han realizado eventos, no obstante cuando hay competencias en Valle de Bravo como el Mundial y Festival Monarca acuden representantes nacionales e internacionales por ser también un lugar referente para este deporte.
El deportista mexiquense llevó este deporte hace 16 años, a partir de ahí se empezaron a sumar más deportistas, en el mejor momento se llevaron a cabo varias ediciones del Festival Internacional de Vuelo Libre, que congregaba a un promedio de 30 pilotos tanto nacionales e internacionales.
Los despegues en Luvianos (ubicado en el sur del Estado de México) son desde el cerro de Nanchititla y el Estanco, que también son de los mejores en la zona, por lo que acuden pilotos para entrenar cuando en Valle de Bravo se lleva a cabo el Festival Monarca y el Campeonato Mundial.
“Pese a que por el momento no hay eventos nosotros seguimos volando cada fin de semana porque ya es una tradición, en ocasiones acuden pilotos de Valle de Bravo para perfeccionar su técnica y aprovechar las condiciones climáticas”, señaló Raunel Peña.
Abundó que Luvianos se caracteriza por tener corrientes de aire muy suaves, por lo tanto es un lugar muy noble para volar al tener un microclima, en igual condición se encuentran Valle de Bravo y El Peñón de Temascaltepec.
Es así que cuando se realizan los eventos del Festival Monarca y el Mundial de Parapente, Luvianos es zona de transición y también de llegada.
“Uno de los días durante el reciente Campeonato Mundial estaba yo volando localmente y prácticamente coincidimos en el vuelo, sólo que yo aterricé en Luvianos y ellos continuaron el recorrido a Valle de Bravo”, dijo.
En cuanto a la posibilidad de tener el Festival de Vuelo Libre en diciembre con motivo de la Feria de Luvianos a mediados de diciembre, Raunel Peña reconoció que es muy probable que no se realice, ya que el Ayuntamiento no ha tenido el interés en esta administración, no obstante no se descarta que pueda haber algún cambio favorable en los próximos días.
La disciplina de parapente forma parte de las actividades de vuelo libre y tiene su origen en Francia durante los 80, requiere de un paracaídas que es un planeador flexible que no pesa más de 20 kilogramos, durante el vuelo es recomendable no subir más de los 4 mil metros de altura.
Raunel Peña precisó que para que los pilotos puedan volar de manera recreativa o competitiva se les exige una amplia gama de conocimientos del clima, física y aerodinámica, pero también de dispositivos tecnológicos que le darán los datos precisos de ubicación y las condiciones de vuelo, con lo cual se garantiza su seguridad, por ello se deja poco para la improvisación, pues se convierte en un proceso científico.