Toluqueños festejan el segundo triunfo de la Selección Mexicana

Cientos de aficionados festejaron en el monumento del Águila

Domingo Fernández

  · sábado 23 de junio de 2018

Foto Luis Camacho.


Toluca, México.- México sigue demostrando su autoridad en la Copa del Mundo Rusia 2018 al vencer 2-1 a Corea del Sur y segundo triunfo en el certamen, que invitó a los seguidores a celebrar esta vez los goles de Juan Carlos Vela y Javier “Chicharito” Hernández para liderar el Grupo F y ver de cerca los octavos de final.

En el Monumento del Águila en Paseo Colón de la capital mexiquense todo estaba listo para festejar el buen paso del conjunto nacional en Rusia, los vendedores de banderas y todo accesorio necesario desde temprana hora estaban disponibles.

El desplegado de elementos por seguridad pública ya estaban aguardando la llegada de la gente, pero se llegaron las 12:00 horas y nadie llegaba, solo algunos grupos aislados se perseguían con los en la guerra de espuma que anunciaba poco, los vendedores empezaron a mostrar preocupación.

Algunos autos que pasaban por la glorieta sonaban el claxon como para invitar a la reunión, un local comercial puso música de mariachis, por los alrededores sobre todo los niños sonaban sus silbatos pero con poco eco, el tradicional punto de reunión seguía desolado.

Fue exactamente a las 12:12 horas cuando un grupo de jóvenes se decidió a comenzar la celebración ondeando la bandera, y a ritmo del Cielito lindo pronto se comenzaron a sumar más personas que alternaron con el grito de “México”, “México”.

Más de 500 aficionados entre niños, jóvenes, adultos y hasta algunas mascotas festejaron con intensidad el buen paso de México en la Copa del Mundo, mientras que los vendedores también celebraron sobre todo las buenas ventas de spray de espuma.

Con el tránsito detenido la fiesta se extendió en los alrededores, después hasta los vendedores de mangos llegaron, los de papas y hasta gelatineros que surtieron lo necesario para avivar el ambiente que seguía después de las 13:00 horas.

Poco a poco se fue desintegrando el grupo para retomar las actividades normales del día, con sus familias, al trabajo o buscar otras lugares donde seguir la fiesta.