Una de las características que diferencia a marzo de los otros meses es su aproximación a los cuerpos celestes que envisten al universo, motivo por el que es considerado el mes astrónomo por excelencia.
A lo largo de toda su duración desentrama los misterios del espacio que son perceptibles ante nuestros ojos.
Aquí los enlistamos:
El pasado 9 de marzo vimos la segunda súper luna llamada Luna de Gusano que se denominó así desde 1930, cuando se notó que su aparición coincidía con el deshielo primaveral que liberaba gusanos en la zona del hemisferio norte.
Entre el 18 y 19 de marzo acontecerá una doble conjunción de nuestro satélite natural con Marte y Júpiter, cuando las órbitas de estos planetas provoquen que primero, el gigante rojo se oculte detrás de la Luna y cree una imagen única de los cuerpos celestes.
Por la mañana del 19 de marzo habrá otra conjunción planetaria que involucrará a Júpiter, el gigante azul que seguirá la trayectoria de Marte y pasará por detrás del satélite.
Cabe resaltar que la primavera llegará entre el 19 y 20 de marzo trayendo consigo el Equinoccio de la estación. Para esta celebración muchas personas acostumbran visitar zonas arqueológicas como Teotihuacán, por lo que te recomendamos planificar tu lista de actividades para esta fecha con tiempo.
El 21 de marzo la Luna tendrá una alineación con Saturno provocando que ambos cuerpos se vean mucho más cerca de nosotros y que durante el Equinoccio de Primavera, disfrutemos del Sol cruzando el ecuador hacia el norte.
Mercurio también jugará un papel importante el 23 de marzo cuando llegue a su máxima elongación o separación del Sol, viéndose de un tamaño gigante desde la Tierra. Cabe destacar que este fenómeno ocurre con una periodicidad de 3 o 4 meses.
Venus será otro planeta que logrará una máxima elongación el 24 de marzo y será visible desde nuestro planeta cuando la Luna entre en fase de “Luna Nueva”, ofreciendo un paisaje nocturno espectacular para culminar el mes.