Las diversas situaciones y el entorno influyen para que una persona esté de buen humor y feliz, sin embargo en la química del cerebro hay otros aspectos que se deben tomar en cuenta, se trata de las hormonas.
Las hormonas son los mensajeros químicos del cuerpo ya que viajan a través del torrente sanguíneo a los órganos y tejidos, con el tiempo llegan a afectar muchos procesos distintos en el organismo como el crecimiento y desarrollo, metabolismo, función sexual y modulación de estados de ánimo como la felicidad.
Entre sentir una situación y reaccionar a ella, los neurotransmisores y las hormonas ayudan al cerebro a comprender, evaluar y comunicar lo que se está experimentando, estos tienen funciones específicas, cada uno de ellos se activa de cierta manera, indica algunas emociones y estimula determinadas áreas.
Por lo que toca a la felicidad las principales sustancias químicas de señalización incluyen a la serotonina, dopamina, endorfina y oxitocina.
Por medio de la serotonina, los individuos mantienen en balance los estados de humor, además de promover sentimientos de bienestar y recompensa, con las endorfinas se elimina el dolor de manera natural lo que permite superar el estrés.
La dopamina es conocida también como la hormona del bienestar ya que juega un papel importante en el sentimiento de alegría, placer y recompensa, mientras que la oxitocina promueve la interacción social y ayuda a sentir emociones positivas, así que tener estas cuatro hormonas en equilibrio es fundamental para una buena salud mental.
Estas hormonas se pueden conseguir en los alimentos; por ejemplo la serotonina está en el pavo, pollo, leche, pescado, tofu, calabaza, nuez, así como en ácidos grasos omega 3, magnesio y zinc.
En las lentejas, huevos, omega 3, mejillones, naranja y piña, producen endorfinas, en tanto que para fomentar la interacción social se debe de consumir romero, perejil, hierbabuena, tomillo y eneldo, finalmente la hormona del bienestar está en el chocolate, fresas y arándanos, té verde, pescado y camarones.