Así como el ajedrez es recomendado para impulsar el desarrollo de la inteligencia, hay otro instrumento para hacer cálculos matemáticos que ha sido olvidado en la mayor parte del mundo pero que los expertos afirman permite mejorar la memoria y la concentración, se trata del ábaco.
El ábaco es una tablilla de madera con cuerdas y alambres paralelos. En cada uno de ellos hay diez bolas móviles, con este instrumento se pueden hacer cálculos aritméticos simples como sumas, restas, multiplicaciones y divisiones, pero también otros más complejos.
Aunque su origen exacto se desconoce, hay referencias de su existencia alrededor de mil años antes de nuestra era, de acuerdo al artículo publicado en el portal de la BBC News Mundo con el título: Ábaco: la milenaria herramienta de cálculo que se usa en Japón para reforzar la memoria.
Con la llegada de la calculadora electrónica la gente vio al ábaco como una reliquia del pasado, sin embargo Japón (donde llegó a mediados del siglo XVI) es uno de los países donde se sigue utilizando, incluso los expertos tienen grados, como en las artes marciales, uno de nivel 10 dan es capaz de multiplicar cifras de seis dígitos mentalmente.
“Pero aprender a manejar esta herramienta ayuda a procesar la información con más rapidez y eficiencia. Desde el siglo XX es una calculadora más, pero para nosotros es un instrumento de desarrollo cognitivo”, detalla Kazuyuki Takayanagi, profesor de ábaco.
Incluso muchos estudiantes toman clases extracurriculares de esta herramienta para alcanzar un mayor nivel general en el manejo de los números.
El ábaco ayuda a desarrollar el hemisferio derecho del cerebro, hace pensar, los estudiantes aprenden a ser pacientes, concentrarse, procesar mejor la información y sobre todo se adquieren mejores habilidades matemáticas.
No obstante los académicos reconocen que a pesar de sus beneficios, el ábaco no es una herramienta fácil de utilizar, sobre todo si no se practica desde una edad temprana.
Aprender el ábaco desde el principio siendo adulto puede ser un poco difícil porque están acostumbrados a otros métodos de cálculo, pero de lograrlo los beneficios pueden durar toda una vida.