Como bien es sabido, esta es la época en la que hacer maratones con películas relacionadas con el terror aunque muy pocos sabemos si esto es benéfico para los más pequeños del hogar.
Ante esta situación, el psicólogo Mike Brooks explicó que es un hecho que muchos de los productos que los pequeños ven en las pantallas repercute no solo en su estado de ánimo sino también en su desarrollo por lo que destacó que no es motivo de pánico, pero sí de tomar ciertas medidas adicionales para garantizar la salud mental de los más jóvenes.
Pero... ¿Es malo?
El psicólogo especificó que ver un poco de horror no convertirá a un niño feliz en un psicópata o en un pequeño con problemas emocionales.
En su lugar el experto pide que se tomen en cuenta que los niños podrían desarrollar miedos incrementados hacia la oscuridad o a entes imaginarios lo cual generaría problemas a la hora de dormir puesto que tendrían pesadillas.
"Es importante medir el impacto que causa en los pequeños, pues cada uno es diferente y se espantan de manera distinta. Ayudarlos a reflejar su experiencia y contar lo que sintieron les ayudará a entender mejor las películas de terror”, concluyó Brooks.