Muchos integrantes de la generación Z se sienten solos, tienen los sentimientos más agudos de desconexión social los cuales se incrementaron debido a la pandemia del Covid-19, pero también existen otros factores que han influido.
Esta generación abarca a las personas que nacieron entre 1996 y principios del 2000, que también les trajo importantes beneficios como más años de educación formal y tasas menores de deserción escolar, incluso es más probable que eviten el uso de drogas y bajas estadísticas de embarazos en la adolescencia.
No obstante, pese a estas ventajas se sienten demasiado solos, de acuerdo a un estudio realizado por la aseguradora de salud Cigna en 2020.
Aunque el aislamiento por la pandemia del Covid-19 es uno de los factores, lo cierto es que hay otro que se relaciona con el hecho de que es la primera generación donde padres y madres están en el mercado laboral y los tiempos para atender a los hijos son cada vez más escasos.
También es de las que enfrentó a los cambios derivados de la tecnología, en los jóvenes las actividades de esparcimiento y escuela limita el tiempo de convivencia, mientras que los papás con horarios agotadores en el trabajo y los zoomers dan menos tiempo libre.
De acuerdo al informe del Survey Center on American Life, únicamente 38% de las y los estadounidenses que pertenecen a este grupo explicaron haber comido con su familia todos los días durante la infancia.
Las generaciones anteriores muestran un porcentaje muy diferente porque las comidas familiares regulares eran la norma, en el caso de los baby boomers (76%) comentó haber comido juntos, junto con 59% de la generación X y el 46% de las y los millennials.