La pesca deportiva es una actividad acuática que se practica en el embalse de este Pueblo Mágico, teniendo una gran variedad de especies de peces que pueden ser pescados desde la orilla del lago.
Lubina, charales, mojarra, carpa y tilapia, son algunas de las especies más populares que se encuentran en la presa de este municipio, y pueden ser pescadas en cualquier época del año, siempre y cuando haya producción.
"Nosotros aquí pescamos de todo, más más lubina, pero cuando hay en abundancia, también sacamos charales y mojarritas, todo el pescado de aquí está sabroso", platicó Filomeno Hernández, pescador de Valle de Bravo.
Está actividad se puede hacer desde la orilla de la presa o al interior de la misma, a bordo de una lancha.
Para la pesca deportiva que se practica desde la orilla del embalse se necesita una vara de carrizo con hilo, un corcho, anzuelo y carnada, que por lo general son lombrices de tierra vivas.
"Si traes un carrizo es fácil hacer el nudo del hilo con el anzuelo y ya tienes una caña para pescar. Con lombriz desde la orilla sale mucha tilapia y mojarra, lubinas también pero es más abundante las otras especies porque les gusta estar comiendo cerca del lodo", explicó Filomeno Hernández.
También se puede pescar con caña de fibra de vidrio profesional, las cuales utilizan curricanes o carnada viva para atraer a los peces desde el interior del embalse.
"También se pesca con caña profesional, pero ahí si debes de saber como ir jalando el hilo, sentir cuando el pescado se está tragando el curricán y en ese instante jalar, debes de tener talento en ese tipo de pesca", refirió.
Para pescar en el interior del embalse es necesario tramitar un permiso de pesca deportiva emitido por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), a través de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca.
El costo para para practicar la pesca deportiva durante un día de $146.00. Mientras que, para un mes es de $549.00, y para un año es de $733.00.
Los límites de captura por pesca son de 10 ejemplares diarios de la misma especie, siempre y cuando no sean pescados en proceso de crecimiento o que estén por poner huevecillos.
También se puede pescar para comercializar con red o atarraya, pero los costos del permiso y las especificaciones son diferentes, al no ser una práctica deportiva-recreativa, sino comercial.
La temporada donde mejor le va a los pescadores locales es en las lluvias, a partir de mayo, hasta finales de septiembre, aunque todo el año es apto para pescar, pues en la presa Miguel Alemán Váldes siempre hay peces.