Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) revelan que en México 15.1 millones de habitantes son adultos mayores, lo que aumenta las oportunidades para los especialistas que se encargan de cuidar a las personas de la tercera edad.
Los cuidadores también atienden a pacientes con discapacidad o con alguna enfermedad que necesite cuidados diarios, de acuerdo a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco),
Además los cuidadores pueden ser informales y formales, en el primer caso son los familiares, amigos o vecinos, no tienen un horario fijo y tampoco reciben un sueldo ya que su compromiso con la persona es más por afecto.
Por lo que toca a un cuidador formal este tiene conocimiento de los cuidados que necesita la persona, cuenta con una formación académica en geriatría, enfermería, rehabilitación y sobre todo experiencia en acompañamiento y apoyo emocional, aunado a que tienen un horario fijo de trabajo y un sueldo.
Un cuidador formal ofrece diversos servicios, entre ellos técnicas de relajación, movilización y traslados, higiene personal y vestido, alimentación, aplicación de medicamentos.
También apoyan con técnicas para el manejo del estrés, atención de emergencias, apoyo emocional, entre otros.
En cuanto a los costos de sus servicios, la Profeco refirió que van desde los 600 hasta 800 pesos diarios en jornadas de 12 horas en lugares como la Ciudad de México, sin embargo en otras entidades como Veracruz el costo puede superar los mil pesos.
En décadas recientes y dadas las características de nuestra sociedad, el número de cuidadores formales está creciendo considerablemente.