Como bien es sabido cada vez esta más cerca el invierno y con ello nuestro cuerpo, específicamente nuestra piel, experimenta varios cambios como la deshidratación motivo por el cual puede sentirse resequedad o tirantez.
Ante esta situación, el rostro y las manos son los primeros en resentirlo ya que existe un deterioro en la capa hidrolipídica la cual deja a tu cutis expuesto a las condiciones y agresiones externas.
Consejos
Una de las cosas más importantes es que al menos en tu rostro tengas una rutina adecuada por medio de la cual puedas hacer una exfoliación y limpieza profunda con la que removerás las células muertas.
En esta temporada debes recurrir a una crema especial con una alta cantidad de nutrientes así como un bloqueador con un factor de protección solar mínimo de 15.
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En lo que respecta a tus labios es importante que uses hidratantes especiales y bálsamos que ayuden a prevenir la resequedad debido a los cambios bruscos de temperatura.
En cuanto a la ducha debes considerar evitar el agua demasiado caliente, es mejor que recurras a una temperatura tibia y jabones que ayuden a reconstruir e hidratar tu piel.
Por último, es muy importante que tomes suficiente agua. Esto, para que tu organismo elimine las toxinas que hacen que la piel se vea con un aspecto desagradable.