Aunque enfrentó el brote de influenza durante el año 2019, el médico general David Salas, calificó como "devastador" el virus que provoca el Covid-19, al cual, aseguró, pese a la vacuna no se ha logrado “domar” a casi dos años de su aparición.
Con casi 30 años de desempeñar su profesión en distintos hospitales de la entidad, el médico explicó que jamás imaginó enfrentar un virus tan agresivo como el actual, mismo que ha puesto en jaque al mundo entero.
“Cuando comienzas a ejercer tu profesión te enfrentas a situaciones difíciles, pero que se pueden resolver, pero esta pandemia rebasó a todo el sistema de salud mundial y por ende todos los países sufrieron”, indicó.
Una pandemia, aceptó, difícilmente estaba presupuestada en su trayectoria como médico, pero cuando en el año 2019 surgió la influenza y fue controlada en poco tiempo, no cobró mucha relevancia, pues la vida siguió.
“Sí me tocó ver gente que llegaba a los hospitales con influenza, algunos morían, pero la mayoría se recuperaba. Existía un tratamiento avalado y eso ayudó a aminorar el impacto del virus H1N1”, destacó.
“Yo creo que nadie incluyendo nosotros como médicos, pensamos que este nuevo virus iba a ser tan devastador para todo el mundo. Yo en mi caso, pensé que iba a ocurrir algo parecido a la influenza, pero no fue así, vi a casi familias enteras morir por el virus SARS-CoV2”, señaló el médico asignado a la zona sur del estado.
"Era desesperante que a pesar de que los tratamientos anti-bacterias y antiinflamatorios, muchos pacientes no sobrevivieron, ya que la enfermedad se ha presentado en diferentes formas, atacando principalmente al sistema cardiovascular y respiratorio, aunque también se han vistos daños en pacientes dentro de la mucosa gastrointestinal", recordó.
“A la fecha no se ha encontrado el tratamiento exacto para erradicar este virus, a diferencia de la influenza que se encontró rápidamente y en poco tiempo se controló la enfermedad”, agregó el médico David Salas.
El Covid-19, dijo, es una enfermedad que no respeta ni condición socio-económica ni cultural y lo mismo se presentó en países pobres que en potencias mundiales, con resultados catastróficos para la raza humana.
Con la aparición de la vacuna, expresó el médico de 65 años de edad, se ha frenado el número de muertes y la misma gravedad de la enfermedad, aunque no se pude cantar victoria, pues el virus sigue entre nosotros.
“Lo único que puedo decir como médico es que ante este virus, lo mejor que podemos hacer es aplicarnos la vacuna pues eso es un escudo para esta enfermedad que lamentablemente todavía sigue cobrando vidas no sólo en nuestro país sino en el mundo entero”, finalizó.