Las diversas emociones como la ansiedad y el medio, además del racionamiento, son elementos claves que permitirán sea más fácil la adaptación a la nueva normalidad cuando pase la etapa crítica de contagio por el Covid-19.
Así lo señaló, el coordinador del Centro de Estudios y Servicios Psicológicos Integrales (CESPI) de la UAEM, Alejandro Gutiérrez Cedeño, tras los anuncios de los planes de regreso a las actividades suspendidas temporalmente por la pandemia tanto en el ámbito federal como en el estatal.
El especialista de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), advirtió que los espacios en donde exista una mayor tendencia a las aglomeraciones o concentraciones de gente es donde habrá más temor por parte de las personas una vez se retorne al grueso de las actividades.
"Nueva normalidad"
En la fase 3 de la emergencia sanitaria por el coronavirus, el profesor comentó que hablar de normalidad refiere a un tema meramente estadístico; sin embargo, cuando se habla de una nueva normalidad integra comportamientos que se convertirán en normales, explicó.
“Como nuevas formas de estudiar, nuevas formas de mantener distancia, de convivir en lo público, en lo social, va a pasar mucho tiempo en el que seguiremos usando cubrebocas, lavándonos las manos constantemente, es decir, esa es la nueva normalidad”.
Miedo
El manejo de emociones, dijo tendrá mucho que ver en el regreso paulatino a las actividades, porque seguramente en ese proceso las personas se enfrentarán a angustia, miedo, temor, novedad y ansiedad, cuyos elementos ayudarán a la adaptación.
No le tengamos miedo a lo que nos está ocurriendo porque en realidad es la forma de adaptarnos.
Recordó que antes de la pandemia era normal subirse a un elevador con cupo lleno y una persona estornudaba se le decía salud, ahora se ve mal a quien tose o estornuda en un sitio público.
En ese rubro, agregó, es prioritario el razonamiento que vendrá ayudar a razonar, analizar, reflexionar y pensar.
Ejemplificó al salir de compras ya sea un centro comercial o una tienda con protección y precaución, o bien que los jóvenes eviten el contacto físico con sus amigos o compañeros.
Consideró que la suspensión presencial de clases fue oportuna, y un acierto para evitar el contagio masivo.
Además, el retorno a las escuelas se prevé cuando no haya riesgo de contagio, es decir en la fase de semáforo de alerta en color verde, lo cual, afirmó es acertado.
Cercanía y aglomeraciones
Consideró que las aglomeraciones o concentraciones con mayor cantidad de gente serán las que seguramente causarán más temor o ansiedad en la nueva normalidad.
“Creo que todos los espacios tienen alto riesgo, creo donde haya el contacto directo o la aglomeración de las personas es en donde debemos tener más cuidado”.
A la fecha y en algunas empresas, mencionó han tenido precaución con protocolos de seguridad al implementar medidas de higiene como el uso de gel antibacterial, toma de temperatura al ingreso del centro laboral, el distanciamiento entre personas y se contempla en la industria haya un escalonamiento de turnos.
El especialista cerró la entrevista al motivar a la población a juntos salir adelante de la emergencia sanitaria.