Cuando los plásticos se degradan por la luz ultravioleta del sol, las partículas desprendidas aumentan la resistencia de las bacterias ante antibióticos, de acuerdo a un informe de la Escuela de Ingeniería George Brown de la Universidad de Rice.
Los científicos encontraron que los microplásticos proporcionan un perfecto ecosistema para desarrollar microorganismos y contaminantes químicos, pero el resultado más importante del estudio fue que las partículas flotantes entregan a las bacterias la capacidad de generar resistencia a los antibióticos.
La degradación ultravioleta de los microplásticos en el medio ambiente es la plataforma ideal para fortalecer los genes de los microorganismos.
Se agrega que los genes están blindados por cromosomas bacterianos, fagos y plásmidos, todos son vectores biológicos que pueden propagar la resistencia a los antibióticos, disminuyendo su capacidad para combatir infecciones.
A medida que los plásticos se degradan, también filtran productos químicos de despolimerización cuyo propósito rompe las membranas de mis microbios. Este factor le proporciona a los genes resistentes a los antibióticos a mutar a los microorganismos volviéndolos más fuertes.
En la actualidad el plástico se ha convertido en un problema para la humanidad, la producción mundial de plásticos aumentó de forma exponencial, detalla el artículo: microplásticos pueden estar contribuyendo a la resistencia a los antibióticos, publicado por la agencia Notipress.
Durante la década de 1950, el plástico representaba 2.3 millones de toneladas de la basura total a nivel mundial, para 1993 la cifra alcanzó los 162 millones de toneladas y en 2015 llegó a 448 millones de toneladas.