Amámos el azúcar, la disfrutamos en exceso en las comidas, en los postres, en las golosinas y hasta en las bebidas. Tiene un sinfín de variables tales como el azúcar blanca, morena, refinada, mascabado o edulcorantes, pero ¿cuál de todos ellos es más dañino para la salud?
De igual manera, los tipos de azúcar se clasifican en: Glucosa, fructosa, sacarosa, galactosa, maltosa y lactosa.
El tipo con la que más cuidado debe tenerse es la fructosa, que se encuentra principalmente en la miel, frutas, refrescos, dulces y jugos procesados.
La fructosa es la causante de que las células de grasa crezcan alrededor de órganos vitales poniéndolos en peligro, además de desencadenar diabetes y enfermedades cardíacas.
Otro tipo de enfermedades que puede causar son un aumento en la presión arterial, elevación de los triglicéridos y colesterol y obesidad.
Cabe resaltar que su consumo también se relaciona con afectaciones a nivel intestinal y hepático como hígado graso.
Para evitar estos padecimientos, se recomienda una reducción de azúcar a menos del 10% de la ingesta calórica total aunque también es buena opción cambiar la azúcar por sustitutos más naturales.