Tras la muerte de José José, México se encontraba de luto e incertidumbre al no saber el paradero del cuerpo del cantante. Por ello se desató el enojo en contra de la hija menor del Príncipe de la Canción, Sara Sosa Salazar.
Como resultado de esto el ingenio mexicano no se hizo esperar y de la noche a la mañana se fabricó una piñata como símbolo de traición y odio.
De acuerdo con algunas versiones Sarita no sólo se llevó a su papá a Miami sino que también ocultó dos días su cadáver ya que, al parecer, planeaba vender la exclusiva a una televisora estadounidense, así que para quienes quieran desquitar su furia, llegó la nueva piñata de Sarita.
“La piñata para sacar el coraje de no saber dónde está nuestro príncipe para Halloween una buena opción. Sarita casi todos sabemos querer, pero pocos sabemos amar”.