En la gastronomía no solo nacional sino mundial siempre han estado los insectos, platillos que vienen desde tiempos milenarios incluyen a las hormigas, chapulines, grillos, alacranes, escarabajos, entre otros, sus aportes nutricionales son destacados en diversos estudios, sin embargo es una realidad que muchos se consumen sin darnos cuenta.
La razón de que estén en la dieta prácticamente todos los días es porque es casi imposible hacerlos desaparecer de productos como harinas, verduras y frutas, es más, se podrán librar de diversos químicos pero no de los insectos.
Entre los alimentos que contienen insectos están los champiñones, setas, espinacas congeladas, jugo de naranja, chocolate y jugo de tomate.
Por 227 mililitros de jugo de naranja puede contener cinco moscas de fruta, 100 gramos de espinacas congeladas hasta 50 ácaros, pulgones y oruga, en tanto que en 100 gramos de champiñones se pueden encontrar 20 gusanos.
De acuerdo a la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) se estima que las personas consumen entre 453 y 907 gramos de insectos por año.
Lo bueno es que las autoridades sanitarias aseguran que no es motivo de preocupación ya que esas pequeñas cantidades no representan un riesgo para la salud ya que nuestro sistema digestivo tiene muchos mecanismos de defensa, e incluso se trata de proteína extra.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir insectos para combatir la hambruna en algunas comunidades.