La piña colada, dulce y espumosa bebida que encanta a todo el mundo, uno de los cócteles más refrescantes y deliciosos hoy cumple 65 años de su creación. Aunque se sabe que es un trago originario de Puerto Rico y que es su bebida nacional desde 1978, aún se mantiene en disputa su origen.
La realidad es que, si bien hubo varios intentos a lo largo de la historia, la creación de la piña colada fue más bien un proceso de reinvención y perfección durante muchos años por más de una persona, hasta crear la receta que conocemos hoy día.
Un viaje a través del tiempo
A inicios del siglo XIX el pirata puertorriqueño, Roberto Cofresí, combinó el ron blanco, la piña y el agua de coco para compartir con su tripulación, este sería el primer acercamiento a la bebida. Tras su muerte en 1825 la receta se perdió en el fondo del mar de la Historia.
Oficialmente tiene su origen en 1954, en en bar “Beachcomber” en el Caribe Hilton en San Juan, Puerto Rico. El bar tender Ramón "Monchito" Marrero recibió instrucciones del gerente del hotel de crear una mezcla nunca antes vista para atraer clientes.
Intento tras intento, pero algo aún algo faltaba; después de tres meses de prueba y error nació la primera piña colada gracias al recién creado producto "Coco López", una crema de coco inventada en la Universidad de Puerto Rico por Ramón López Irizarry, Monchito tuvo uno de sus ingredientes fundamentales.
Por otro lado el Restaurante Barrachina también se adjudica la creación de la piña colada. Al parecer, en los años 1960 la Casa Gallinares, en asociación con Pepe Barrachina, chef español cuya especialidad era la paella, conoció en uno de sus viajes a sudamérica a Ramón Portas Mingot, quien trabajaba en los mejores bares de Buenos Aires.
Al mudarse Portas Mignot a Puerto Rico comenzó a trabajar con Barrachina en donde, influido por los productos tropicales crea el famoso cóctel, realizado desde ese entonces en este restaurante que al día de hoy atiende a sus visitantes en Puerto Rico.
Sea como fuere, la piña colada es una de las bebidas preparadas con ron más famosas del mundo, y sin importar quien haya sido su creador su delicioso e inconfundible sabor nos remontará siempre a las paradisíacas playas puertorriqueñas.