En México, el tema del estrés y el cansancio afecta al 70% de la población ocupada, por lo que, para contribuir a mejorar la calidad de vida y salud de los trabajadores, Gilberto Sauza Martínez, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales del Estado de México (Concaem), propuso desarrollar un Protocolo Estandarizado de Factores de Riesgo Psicosociales para aplicación de la NOM035 –salud emocional-.
El representante empresarial destacó que la entidad podría ser modelo para su aplicación en todo el país; y el objetivo será promover y cuidar la salud de las y los colaboradores junto con sus familias, generando entornos sociales más armónicos y un país con menor violencia.
Ante ello, el organismo convocó a las instituciones académicas, autoridades de las Secretarías del Trabajo y de la Salud, así como a la iniciativa privada, con el propósito de desarrollar un protocolo para detectar y atender riesgos en materia de salud mental y estrés laboral, con el propósito de aplicar correctamente la Norma Oficial Mexicana 035 relacionada con la salud emocional.
La NOM-035, explicó, marca la necesidad de que las empresas identifiquen factores de riesgo psicosocial dentro de las unidades económicas y con ello generar acciones que reduzcan la presión laboral y eviten el aumento en el Seguro contra Riesgos de Trabajo.
Consideró que lo anterior es necesario, porque dichos factores no son claros, pero tampoco universales, por lo que un trabajo profesional de expertos en esa materia puede generar una herramienta para la identificación -real y efectiva- de dichos factores y facilitar la toma de decisiones que contribuyan a mejorar la calidad de vida de la población, al tiempo que se incrementaría el nivel de productividad de las y los colaboradores.
De acuerdo con una investigación de la empresa KPMG cada peso invertido para la prevención del estrés genera cuatro pesos más en productividad, además de la disminución del gasto por atención médica, ausentismo laboral y rotación de personal.
“Es un tema que se reconoce hace poco y si bien la aplicación de la Norma establece que las empresas debemos identificar esos Factores de Riesgo, la realidad es que sigue quedando a discreción de las áreas de recursos humanos y de los propios profesionales en salud mental, la identificación de sus riesgos”, aseveró.
Por lo anterior, subrayó que su propuesta va enfocada a establecer un estándar generalizado y que vaya más allá, no sólo para la identificación, sino para la definición de las acciones de prevención.
Sauza Martínez refirió que el objetivo principal debe ser el promover y cuidar la salud de las y los colaboradores e impactar positivamente en sus familias, de manera que se generen entornos sociales armónicos, en los cuales la sociedad pueda desarrollarse, reduciendo los índices de violencia, los accidentes -tanto de trabajo, como en el trayecto-, elevar la calidad de vida e impulsar una sociedad consciente de los cuidados preventivos.
Sostuvo que desde el sector privado mexiquense buscarán alianzas con instituciones educativas que permitan establecer modelos de atención primaria, con actividades de integración, lúdicas y de armonización dentro de los centros laborales; además de otras acciones como la rotación dentro de los espacios laborales, la aplicación de modelos home office y la reorganización de cargas de trabajo.
“Desde el Concaem estamos buscando la operación de mesas de trabajo con especialistas, para establecer las pautas de acción en el ámbito estatal e incluso podría reproducirse en todo el país”, concluyó.