En México, la Ley sobre Teletrabajo estipula que para considerarse ser un trabajador en home office se debe realizar más del 40% de las actividades de manera remota, por lo que el tiempo que dura una jornada laboral es importante para establecer una relación bajo esta modalidad.
Neja Brglez, directora de plataformas digitales en la empresa JOIN2WORK, apuntó que tradicionalmente la jornada laboral y la productividad del empleado se medían a partir del cumplimiento del tiempo que pasaba en la oficina o de las actividades que realizaba dentro del centro de trabajo; es decir, su desempeño era resultado de su presencia.
“Esta creencia se replanteó con la implementación repentina del home office cuando el Covid-19 demandó trabajo a distancia, por lo que la conectividad al trabajo produjo que las jornadas laborales se alargaran sin tener un límite claro entre el horario laboral, ni pensar en el derecho a la desconexión”, señaló.
La especialista indicó que la dinámica laboral presencial, basada en una medición por horas, ya no será la forma más eficiente para cuantificar la productividad o compromiso de los trabajadores, porque dicha métrica puede funcionar como un punto de partida, pero no como un índice global para los esquemas de trabajo a distancia e híbridos.
También explicó que la dinámica del teletrabajo implica mudar la actividad del colaborador a estrategias de trabajo por objetivos, esto es que sus actividades estén orientadas a realizar acciones concretas planeadas previamente para que las ejecute en el lapso de tiempo estipulado, ya sea horario de entrega o a lo largo de la jornada laboral.
Pidió tomar en consideración que los conceptos de jornada laboral y fuera de ésta cambiaron, porque los colaboradores actualmente ya no pueden mostrar apego a horarios tradicionales, lo que se mide ahora es el cumplimento de las actividades dentro del día o periodo establecido.
Agregó que las plataformas digitales que monitorean estas actividades requieren aplicarse con la intención de comunicar que no se busca la conectividad 24/7, sino el cumplimento de actividades con horas planeadas.
Finalmente, dijo que en general la recomendación es cotidianamente agendar espacios para contestar correos, actividades estratégicas y de colaboración.