Aunque el ciclo escolar 2018-2019 está a punto de concluir (el próximo 15 de julio) y la actividad disminuye, esto no ha sido un aliciente para que un número mayor de personas se den cita en el Centro de Servicios Administrativos Miguel Hidalgo y Costilla para realizar sus trámites de reemplacamiento, pues es evidente que aunque existe un número importante de ciudadanos, no se compara con la actividad registrada la semana anterior.
Al realizar un recorrido por el lugar, Manuel señaló que más que acudir a estas oficinas por la cercanía del periodo vacacional, la realidad es que “es el día en que tuve tiempo, ya necesitaba cambiar mis placas”
.
“No creo en estos programas, pero era necesario que aprovechará y me pusiera al corriente, ya que me querían cobrar 6 mil pesos para darlas de baja, porque son de Michoacán”, aseveró. En contraste, pago 2 mil pesos tras casi 15 años sin ponerse al corriente.
Morosidad
A principios de junio, la Secretaría de Finanzas estatal propuso a los diputados locales otorgar un 50 por ciento de descuento a los contribuyentes morosos en el pago de tenencia o refrendo para que pudieran reemplacar.
En su oportunidad, el coordinador del grupo parlamentario de Morena, Maurilio Hernández advirtió que existen casos de personas que contabilizan entre 10 y 12 años de rezago, y que difícilmente hubieran podido regularizar su situación por la deuda que tienen.
No hay dinero
Por su parte, Martha Figueroa dijo que en muchas ocasiones no es que la gente no quiera regularizar su situación, sino que los salarios de los trabajadores son tan bajos que le deben dar prioridad a otro tipo de gastos, como la salud, la alimentación, la escuela, ropa y calzado de sus hijos.
“Yo únicamente me vine a enterar de cómo está el trámite, porque la realidad es que no tengo dinero para llevar a cabo el reemplacamiento. La autoridad debe entender que lo que ganamos en nuestros trabajos es muy poco”, externó.
Mientras que Patricia Quiroz consideró que se trata de un esquema que apoyará a las personas que registran rezagos en el pago.
“Espero que realmente el programa sea lo que nos prometieron y no ocurra igual que con las despensas que nunca he recibido, porque en muchas ocasiones las autoridades nos engañan. Lo ideal es que para evitar trámites engorrosos implementarán un esquema como el de las verificaciones para que sólo acudan determinadas personas y nos atiendan adecuadamente”, afirmó.
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