Toluca, México.- Para evitar ser sorprendidos por falsos inspectores o verificadores, siempre buscamos acercamiento con las autoridades para confirmar que estén autorizados.

Si vemos algún comportamiento inusual en verificadores o actas que generen dudas lo que hacemos es reportarlo a las autoridades de las diferentes instituciones y que nos digan si es verídica o no la visita, subrayó el presidente de la Asociación de Bares y Restaurantes del Estado de México (Asbar), Patricio González Suárez.

Sí se han presentado las denuncias, aunque no son muchas, contra estos falsos inspectores, detalló.

Los operativos en los cuales los verificadores llegan acompañados de policías son los que más nos afectan, pues si llega la Coprisem a hacer una revisión pero llega sólo el inspector los clientes no se dan cuenta y no se preocupan, señaló el dirigente empresarial.

Si se hacen estas revisiones en coordinación con las autoridades correspondientes, sin que haya abusos, nosotros somos los primeros que estamos a favor porque hay muchos lugares irregulares que estamos a favor que los revisen y en su caso los cierren si tienen sus permisos correspondientes porque son además un riesgo para la población, manifestó González Suárez.

Recordó que en el Estado de México existen casi 60 mil unidades económicas dedicadas a la venta de alimentos y bebidas y es de imaginar todo lo que puede pasar en ellas.

Sí puede haber verificadores que traten de abusar y a las autoridades se les puede salir de control porque son muchas las operaciones que se necesitan ante esta cifra, reconoció.

Detalló que entre las principales irregularidades que pueden encontrarse en establecimientos del sector están funcionar fuera del horario permitido, vender alcohol a menores de edad y expender bebidas adulteradas.

Recordó que en algunos casos las sanciones pueden ser hasta de más de 300 mil pesos, por ejemplo, citó, en la nueva Ley de Competitividad vender alcohol a menores de edad superan esta cifra.